El periodista Andreu Missé documenta la "historia de un escándalo", el "drama" humano y la actitud "heroica" de la gente que se echó a las calles para exigir que le devolviesen su dinero en 'La gran estafa de las preferentes'.

Socio y director de la revista Alternativas Económicas, el autor ha comentado este jueves en Santiago que el "engaño masivo" de la emisión de participaciones preferentes y obligaciones subordinadas en España le impactó "desde el primer momento".

En la presentación de este libro, que pretende "dejar constancia" de lo ocurrido -algo por lo que, al menos en Galicia, no habrá responsables penales, en opinión del exfiscal superior de Galicia-, Missé ha advertido de que esta investigación continuará, por su parte y por la de sus compañeros, y ha destacado que "hay que sacar muchas enseñanzas".

Una de ellas, según ha subrayado ante la presencia de afectados por este abuso del sistema bancario en Galicia, es el ser conscientes de que si "la dignidad se levanta ante los poderosos" es posible que, aunque sea en parte, se haga justicia.

REIVINDICACIÓN DEL EXFISCAL SUPERIOR

Al lado del periodista han estado Xesús Domínguez y Xulio Vicente, dos activistas que en la comunidad gallega dieron la batalla, durante meses, hasta lograr que, bien vía judicial o bien a través del arbitraje, miles de gallegos vieran reintegrados sus ahorros, y también el diputado del BNG Francisco Jorquera y el exfiscal superior de Galicia, Carlos Varela.

Este último, que en su día fue proactivo en defensa de los intereses de los clientes, en su intervención ha llamado la atención, desde la perspectiva jurídica, sobre cómo Europa, a diferencia de Estados Unidos, carece de instrumentos "que permitan resolver estos abusos" de forma colectiva.

En este sentido, Varela ha apuntado, como opción, a la habilitación del Ministerio Fiscal para que en "estafas" como esta o como la de Volkswagen sea posible llegar a una solución con "una sola demanda, una sola prueba y una sola sentencia".

"HISTORIA DE UN ESCÁNDALO"

En la historia de este "escándalo", como lo ha definido el exfiscal superior, el periodista Andreu Missé parte del "pecado original" que supuso, en 2003, "legalizar" de alguna forma esta práctica, que desde 1998, según ha relatado, se llevaba a cabo en paraísos fiscales.

Tras esta "amnistía", en 2007-2008, llegó la crisis, y "los bancos se vieron con falta de capital", según ha expuesto. "Al no poder colocarlo a los inversores -este producto-, lo colocan a los ahorradores, con el agravante del engaño en la protección" que proporcionó el estado, según ha censurado.

Missé ha enumerado, una a una, las "infracciones" que encadenó la historia de las preferentes, desde el hecho de que las entidades financieras se saltasen el test al que debían someter a los usuarios, hasta el utilizar a Europa "como excusa fantástica" para todo. "Y en 2011 se descubre el fraude", ha resaltado.

Ahí empezó la movilización, de la que el periodista ha elogiado a sus participantes en la comunidad gallega, en su mayoría personas mayores que se vieron sin los ahorros de toda una vida, y ha cargado, en este extremo, contra el establecimiento de unas quitas para las que no había "soporte comunitario" y España fue "conejillo de indias".

Por último, ha reprobado el arbitraje que se favoreció "para quitar presión" de las protestas, puesto que, según ha dicho, "no fue un arbitraje" ni fue "para todo el mundo". A este respecto, ha recordado que fue una empresa contratada por los bancos -PwC en el caso de las cajas gallegas- la que "seleccionó a los que recuperarían" su dinero.

"DEMOCRACIA ENFERMA"

Para Andreu Missé, tanto la "estafa" de las preferentes como los desahucios dan la idea de una democracia "enferma", en la que "el poder financiero tiene un poder desproporcionado".

"Y aquí no pasa nada, los órganos supervisores no tienen capacidad sancionadora", ha lamentado, aun aludiendo a la posibilidad de que, en el caso de Bankia, sí haya responsables penales por estos hechos.

De esta forma ha resumido su libro, que, según ha precisado, no está dirigido contra la banca sino "contra los abusos de la banca", entre los que ha inscrito, también, las cláusulas suelo y otras prácticas.