El personal de seguridad de Metro Bilbao utiliza los jardines de la estación de Algorta para que los perros que les acompañan en las labores de vigilancia hagan sus necesidades, como se observa en la fotografía que nos ha enviado un lector. Pero, los vigilantes no recogen las cacas, las dejan ahí, sobre el césped. En concreto, el lector informa de que lo ha comprobado varios sábados entre las 8.00 y las 8.45 horas y, de hecho, se dirigió a uno de los vigilantes para requerirle, sin éxito, que recogiera los excrementos del perro. Las ordenanzas municipales de Getxo prohíben que los perros accedan a los jardines.