La Guardia Civil ha detenido en Martorell en el marco de la operación 'Arriaca' a un paquistaní por tráfico de seres humanos después de que  abandonara a 34 inmigrantes tras un accidente de tráfico en Austria.

El operativo se ha llevado a cabo en colaboración con las autoridades del país europeo y el detenido, que era conductor de la furgoneta en la que transportaba ocultas a 34 personas, se le imputan los delitos de tráfico ilícito de seres humanos y lesiones graves por imprudencia, según informa la Guardia Civil en una nota.

La investigación comenzó a raíz del accidente, ocurrido en agosto de 2015, cuando una furgoneta que transportaba personas inmigrantes de origen afgano e iraquí volcó a gran velocidad. Como consecuencia del mismo, el conductor se dio a la fuga sin ser identificado y abandonó a las personas que transportaba, algunas de las cuales resultaron heridas en el suceso.

El detenido se desplazó a España, donde permaneció oculto para dificultar cualquier investigación realizada en Austria, pero la colaboración a nivel judicial y policial entre los dos países permitió su identificación y posterior detención.

En concreto, las pesquisas se han basado en reconstruir los movimientos previos que realizó en España la furgoneta accidentada, así como en adquirir información sobre el titular de la misma o los conductores habituales. Tras haber situado el recorrido del vehículo, se buscaron indicios que situaran en el lugar de los hechos al conductor.

Fruto de ello dio como resultado la obtención de tres perfiles genéticos obtenidos de varios puntos clave del interior de la furgoneta siniestrada y que posteriormente fueron cotejados con muestras de posibles candidatos.

Tras la emisión de una Orden Europea de Detención y Entrega, el detenido fue localizado y detenido en Martorell desde donde fue trasladado al Juzgado de Instrucción Número 4 de la Audiencia Nacional.

Estos desplazamientos de inmigrantes se enmarcan dentro del enorme flujo migratorio que se estaba produciendo en aquel momento desde los Balcanes hasta Europa. Dicha situación de inestabilidad es aprovechada por organizaciones criminales dedicadas a favorecer la inmigración clandestina y el tráfico de seres humanos.