En la mayoría de las ocasiones los denunciantes simulaban haber sido víctimas de robos con violencia e intimidación, según ha informado la Guardia Civil en un comunicado.

En el primero de los casos, investigaron a A.C.B.A. por supuestamente simular haber sido víctima de una estafa, al manifestar que le habían hecho un cargo en su cuenta de una entidad bancaria mediante una tarjeta de débito que decía había extraviado.

Tras realizar las comprobaciones adecuadas al caso, constataron que el citado cargo correspondía al pago del seguro obligatorio de una motocicleta, realizado con autorización de la denunciante, interponiendo la denuncia para que la entidad bancaria le devolviera el importe del citado cargo.

En el segundo de los casos, investigaron a J.G.V., que denunció que su hijo de nueve años de edad había sido víctima en un parque público de la localidad de un robo por parte de un individuo montado en una bicicleta, que le sustrajo una consola Nintendo, sin especificar otros datos del posible autor de los hechos.

Tras las averiguaciones realizadas por los investigadoress, y ante las inconsistencias detectadas en las manifestaciones de la persona denunciante, ésta reconoce la falsedad de los hechos denunciados, manifestando que su hijo menor dejó olvidada la consola en el parque, y que cómo tenía seguro concertado con una compañía aseguradora, decidió presentar la denuncia para recuperar el valor del objeto.

En el tercero de los casos, fue detenido C.E.N.H., el cual simuló haber sido víctima de un delito de robo con violencia e intimidación y que manifestó que se encontraba en Palomares del Río (Sevilla).

Según su relato, un individuo, del que no pudo aportar datos físicos más detallados, lo agarró por el cuello y lo empujó contra el cristal de la ventanilla de la puerta derecha de su vehículo, fracturando dicho cristal con la cabeza, sustrayendo el presunto agresor porsteriormente documentación del interior del vehículo.

Tras la investigación y con las averiguaciones obtenidas por los investigadores, así como las incoherencias en las manifestaciones de la persona denunciante, él mismo reconoció la falsedad de los hechos denunciados, y que interpuso la denuncia para justificar ante su familia las lesiones sufridas durante una pelea que tuvo con un individuo durante la celebración de una fiesta.

En el último de los casos, fue detenido R.G.P., la cual simuló haber sido víctima de un delito de robo con violencia e intimidación y manifestó que cuando se encontraba de madrugada en un aparcamiento público de Mairena del Aljarafe le abordaron dos individuos, que lo agredieron y lo amenazaron con un punzón, sustrayéndole varias joyas de oro y un teléfono móvil.

La investigación que llevó aparejada incluso una reconstrucción de los hechos en el lugar de perpetración de los mismos, y ante las incoherencias en las manifestaciones denunciante, finalmente éste reconoció la falsedad de los hechos denunciados, manifestando que puso la denuncia al haber perdido el teléfono móvil y en justificación ante su pareja de la asistencia a una fiesta hasta altas horas de la madrugada.

Con estas actuaciones la Guardia Civil ha evitado actuaciones policiales de investigación y judiciales, durante un extenso periodo de tiempo al tratarse en la mayoría de los casos de delitos graves, penados con hasta cinco años de prisión, con el consiguiente detrimento añadido de personal y medios que se puede emplear al servicio del resto de ciudadanos, con perjuicio del trabajo de las Administraciones públicas implicadas.