En concreto, el proyectil era de calibre 260 milímetros, tenía un peso de 219 kilogramos, con una carga explosiva de 25 kilos, ha informado la Guardia Civil en una nota de prensa. La explosión controlada ha tenido lugar a las 13.20 horas de este lunes y ha finalizado "con total éxito", han apuntado las mismas fuentes.

A finales del pasado mes de junio, el GEDEX de la Guardia Civil de Zaragoza tuvo conocimiento del hallazgo de este proyectil por lo que los especialistas se trasladaron al citado lugar donde pudieron observar que se encontraba en el interior de un almacén de la finca.

Una vez inspeccionado y debido a la gran carga explosiva que poseía en su interior, el GEDEX decidió trasladar el proyectil, con todas las medidas de seguridad necesarias, hasta un paraje donde poder proceder a su neutralización mediante una explosión controlada.

Esta última se ha realizado este lunes, para lo que se ha cavado una fosa de dos metros de profundidad, donde se ha introducido el artefacto y se ha cubierto posteriormente con tierra y pacas de paja para amortiguar la explosión.

Igualmente, se ha establecido un perímetro de seguridad de más de 1.700 metros con la finalidad de realizar esta acción sin ningún riesgo para los ciudadanos. Además, agentes pertenecientes al SEPRONA y Seguridad Ciudadana y Núcleo de Reserva se han posicionado en diferentes puntos del perímetro para evitar que cualquier persona pudiese acceder a él.

En este dispositivo de seguridad también han participado bomberos de la Diputación Provincial de Zaragoza (DPZ) pertenecientes al parque de Ejea de los Caballeros y una ambulancia durante la neutralización del artefacto.