En declaraciones a los periodistas en Almonte (Huelva) tras reunirse con la comunidad de regantes 'Condado de Huelva', Sanz ha indicado que en el caso de Bonares está declarado el secreto de sumario y, por tanto, "la actitud debe ser la prudencia y la cautela para no alterar en ningún caso las investigaciones".

Así, afirma que hay que esperar "a que avancen las investigaciones" en lo que "parecen signos claros de que haya sido una muerte violenta", pero, precisa, respecto a las circunstancias de llevaron al fallecimiento de ambos, "dentro de lo que puede ser una muerte violenta, habrá que esperar al resultado de la investigación y la instrucción judicial".

En cualquier caso, Sanz ha descartado en principio relación con lo sucedido en El Campillo, según "las hipótesis con las que estamos trabajando". "Quizás en el tiempo han sido cercanos, pero no cabe hacer una relación entre ambos casos, al menos en la hipótesis en la que ahora estamos trabajando", insiste.