La Universidad de Cantabria (UC) ha recibido la acreditación del Instituto Cervantes para realizar las pruebas de Conocimientos Constitucionales y Socioculturales de España (CCSE) a los aspirantes a conseguir la nacionalidad española.

Con este nuevo reconocimiento como 'Centro de Examen CCSE', la UC está capacitada para realizar las dos pruebas previstas en la Ley 12/2015, de 24 de junio, para la concesión de la nacionalidad española, que abarca también la obtención de un diploma de español DELE A2, o de nivel superior.

La profesora del Departamento de Filología, Carmen Moral del Hoyo, coordina la prueba de CCSE, que comenzará a realizarse los últimos jueves de mes a partir de octubre, con dos posibilidades de convocatoria y en formato tipo test.

Para Moral del Hoyo, esta nueva acreditación supone un "beneficio social" que la UC dispensará a los extranjeros aspirantes a obtener la ciudadanía, al tiempo que puede servir como "puerta de entrada" para que este colectivo conozca la institución y se "familiarice" con los estudios que ofrece la institución académica.

Por su parte, la también profesora del Departamento de Filología, Fátima Carrera de la Red, es la responsable del examen DELE, con la colaboración de Esther González Lavín, docente adscrita al Centro de Idiomas de la UC (CIUC).

Desde el inicio de la promulgación de la Ley, en 2015, la UC es en Cantabria centro acreditado por el Instituto Cervantes para realizar esta prueba de idioma, igualmente necesaria para la obtención de la ciudadanía, ofreciendo tres convocatorias anuales (febrero, mayo y noviembre) que, en el último examen, aglutinó a aspirantes no solo residentes en Cantabria, sino también en País Vasco, Asturias, Cataluña, Galicia y Canarias, ya que la inscripción a esta prueba se realiza on-line a través de la página web del I. Cervantes.

En los exámenes DELE A2, con un índice de aprobados de este colectivo en torno al 70 por ciento, Carrera de la Red cree necesaria la oferta de cursos preparatorios para garantizar el éxito en este tipo de prueba de español, que requiere dominar todas las destrezas orales y escritas, teniendo en cuenta que el candidato dispone de una sola convocatoria y, además, las tasas que fija el Instituto Cervantes "resultan elevadas", según "han manifestado algunos aspirantes a la nacionalidad".