En un comunicado, el SIP ha argumentado que sus manifestaciones y actos de protesta pueden calificarse como "ruidosos", pero "jamás" participarían en acciones como las que han afectado a la propiedad de concejales, y ello "a pesar de la crispación a la que está llevando el equipo de gobierno a la plantilla municipal a base del desprestigio continuo a los trabajadores y las mentiras que difunden".

A juicio del sindicato, es "inadmisible" el "acoso y derribo" al que, en su opinión, la alcaldesa jerezana, Mamen Sánchez (PSOE), "está sometiendo a la plantilla municipal con el fin de complacer a determinados técnicos de su confianza".

Por ello, ha asegurado que seguirán ejerciendo la acción sindical "para defender lo que tantos años de negociaciones costó conseguir", que es "un acuerdo-convenio que respetara y reconociera la labor de todos y cada uno de los trabajadores municipales".

El SIP ha manifestado que "entiende" que su actividad sindical en defensa de los intereses de los trabajadores les posiciona como "el colectivo sobre el que resulta fácil verter la culpabilidad de cualquier acción que se lleve a cabo contra el gobierno municipal y sus componentes", si bien se desvinculan de tales acciones.

En este sentido, ha apuntado que asumirán algunos comentarios "como parte de este conflicto laboral", pero no admitirán "ninguna forma de acusaciones o adjetivos que vayan contra la esencia de la Policía Local o el SIP", en cuyo caso ha anunciado que acudirán a los tribunales.