El acuerdo de Junta de Gobierno refleja el cambio del nombre de los seis espacios públicos -cuatro calles, una plaza y un parque- y se acuerda "dar traslado a la comunidades de vecinos afectadas para su conocimiento por parte de los vecinos".

El Ayuntamiento, por su parte, dará traslado del acuerdo a organismos oficiales y empresas suministradoras (luz, teléfono, gas,...). También se da traslado a Arquitectura del Ayuntamiento "para que proceda a la adquisición de las placas y a su colocación", algo para lo que no está establecido un plazo "aunque se hará en un periodo de tiempo razonable", que Sáinz ha apuntado en "unas semanas o unos meses".

Un plazo que se debe a que "estos cambios suponen molestias para los vecinos y comerciantes de estas zonas", aunque de entrada, ha recordado que se han seleccionado zonas "en las que no hay demasiados vecinos ni locales comerciales", a los que se dará tiempo "suficiente para que los negocios se organicen" con el cambio de las placas con los nombres de las calles.

Posteriormente, ha dicho que "se podrá ir comprobando y evaluando la repercusiones" de estos cambios y, una vez vistos, "se acometerá el resto de las calles previstas" para que se cambien sus nombres, que, en consonancia con el acuerdo del pleno aprobado el 31 de julio de 2015, serán un total de 17 a lo largo de toda la Legislatura.

En concreto, los espacios que ahora cambiarán de nombre son las calles Calvo Sotelo (que pasará a llamarse Presidente Leopoldo Calvo Sotelo); Capitán Cortés (será Beti Jai); Coronel Innerarity (Beata Mª Pilar Izquierdo); y Miguel Escalona (Rodrigo de Arriaga Mendo); la Plaza de Martín Ballesteros (Plaza Barrio de Ballesteros) y el Parque González Gallarza (Parque Gallarza).

Respecto a las críticas de la oposición municipal sobre el proceso con el que se ha llevado a cabo la decisión, Miguel Sáinz ha defendido que "todo se ha hecho tal como se apuntaba en la moción, abriendo un proceso participativo y consultivo con vecinos y comerciantes, en ningún momento se habla de los grupos políticos, pero tampoco les hemos desdeñado".

"Hay que respetar la decisión de los vecinos y los comerciantes tras el proceso consultivo", ha dicho el portavoz municipal. Un proceso que culminó el pasado lunes, 29 de agosto, con la reunión de la Comisión de Memoria Histórica (con la participación de asociaciones de vecinos y comerciantes) en la que se acordó el cambio de estas 6 primeras calles.