La detenida, con iniciales G.M.M.G., con antecedentes por hechos similares, fue puesta a disposición judicial, han informado este jueves fuentes policiales.

El pasado 4 de agosto un ciudadano denunció en dependencias policiales la desaparición de diversas joyas que guardaba en su casa, señalando que las sospechas de la familia recaían sobre una mujer que habían contratado en el mes de julio para la limpieza del hogar, ya que era la única persona, a excepción de ellos mismos, que tenía acceso a la vivienda.

Las investigaciones llevaron a localizar las joyas sustraídas en un establecimiento, donde las había vendido una mujer, identificada como G.M.M.G..

Tras comprobarse que la sospechosa se trataba de la misma empleada a prueba en el domicilio, se procedió a su detención el pasado 16 de agosto por un

delito de hurto.

Las piezas de oro que han sido recuperadas fueron entregadas a sus dueños en calidad de depósito.