Según han informado fuentes de esta entidad, ahora las labores pasan por cubrir con una capa de tierra toda la zona afectada por el incendio para que desaparezca el oxígeno de las partes que continúan combustionando y así conseguir que se apague definitivamente.

A media tarde los bomberos han conseguido acabar con las llamas de la planta, por lo que han pasado a la siguiente fase. En un primer momento se había planteado que una excavadora comenzara a remover los bloques de residuos para apagarlos y así facilitar la extinción.

Sin embargo, finalmente han decidido optar por la utilización de tierra ya que se trata de una solución más rápida que la anterior, en la que podrían haber empleado hasta 10 días.

Las mismas fuentes han apuntado que el helicóptero se ha retirado cuando ya no quedaba fuego y se ha incorporado una base terrestre más, con lo que ya son tres las que trabajan en la extinción del fuego.

En este momento los efectivos remojan los residuos por zonas mientras que la empresa propietaria descarga camiones de tierra y una pala excavadora los aplana.

Aunque estos trabajos se están realizando con rapidez, continuarán a lo largo de toda la noche y durante este martes debido a que el fuego ha afectado a una amplia superficie con centenares de toneladas de residuos compactados en bloques de varias alturas.

Según fuentes del consorcio, el incendio se encontraba confinado en una zona desde la que no podía avanzar. De esta manera, la primera actuación fue cortar el avance de las llamas hacia la zona que todavía no había sido afectada utilizando maquinaria de la propia empresa para crear un cortafuegos.

Efectivos de la Guardia Civil también han colaborado en las tareas de extinción. Afortunadamente ninguna persona ha resultado afectada ni ha necesitado ninguna atención médica.