El actor, escritor y director Patxo Tellería, pregonero de las Fiestas de Bilbao, ha dado la bienvenida a la 39 edición de la Aste Nagusia, unas fiestas sin agresiones sexistas y "solidarias", en un Bilbao "de acogida".

Telleria se ha asomado a la balconada del Teatro Arriaga de Bilbao a las siete de la tarde, desde donde se ha dirigido a los numerosos congregados. El txupin, que ha inaugurado oficialmente los nueves días ininterrumpidos de festejos, ha sido lanzado por la txipenera Gisèle Felli Gorritxo, de Komantxe Konpartsa.

En su pregón, un bertso humorístico que ha combinado euskera y castellano, Tellería ha lanzado mensajes contra las agresiones sexuales y la xenofobia, y a favor de la solidaridad con los refugiados.

El pregonero, que ha animado a vivir la fiesta "en grupo, en trío o a dos", ha asegurado que "las agresiones sexistas nos hartan", y ante el hecho de que algunos "no saben qué es el respeto", ha dicho a los agresores: "anda y que les den".

"La violencia y prepotencia nos dan asco", ha advertido en otro momento, con un juego de palabras en el que ha combinado el significado de las palabras en las dos lenguas oficiales en Euskadi.

Telleria, quien ha advertido de que "la convivencia es oro", ha recordado que Bilbao es "lugar de acogida" porque "esta ciudad es global como aldea", y rechaza la xenofobia. "Seas de Santutxu, Marrakech o de Quito, orain eta hemen, bilbotarra zara eta kitto (ahora y aquí eres bilbaíno, y basta)", ha asegurado.

También ha tenido palabras de acogida para los refugiados, al preguntar: "¿quién decía que más gente no cabía?". "¡Acojamos refugiados, bajemos de la almena!", ha añadido, a la vez que ha afirmado "Con Dios, sin Dios, con Buda o Alá, denak berdinak ez gara jaio ala? (¿o no hemos nacido todos iguales?)

El pregonero ha concluido afirmando que Bilbao es "la hostia" y dando paso a una Aste Nagusia "donde el deseo con la ilusión se topan".

Como cada año, tras el pregón y el lanzamiento del txupin, Marijaia, símbolo de las fiestas, se ha asomado a la balconada para saludar a los numerosos congregados ante el teatro por todo el puente de El Arenal.

El confetti rojo y blanco ha sobrevolado sobre las numerosas personas que han comenzado a bailar tras el txupinazo. Entre la multitud se han podido ver algunas pancartas por el acercamiento de los presos de ETA y otros con mensajes antitaurinos.

Con los pañuelos de fiestas, 'azul Bilbao', los bilbaínos y personas procedentes de otros lugares, han comenzado a desperdigarse por el recinto festivo que, desde este sábado y durante nueve días, ofrecerá un programa repleto de acontecimientos.

A las ocho de la tarde, Mariajaia ha procedido a la apertura de las txosnas de Bilbao, instaladas en el recinto festivo del Arenal, principalmente.

ABURTO

Los actos previos al txupinazo que ha dado inicio a la 39 edición de la Aste Nagusia, han comenzado a las seis de la tarde en el teatro Arriaga, donde el alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, junto a la concejal delegada de Igualdad, Cooperación, Convivencia y Fiestas, Itziar Urtasun, y el resto de la corporación municipal, han presidido la recepción oficial a Marijaia, al pregonero y a la txupinera.

Tras el aurresku de honor, se ha hecho entrega de los atributos a la pregonera y txupinera de esta edición, y se ha homenajeado al promotor del concurso de Fuegos Artificiales de la villa.

En este acto, han estado también representantes institucionales de la Diputación foral de Bizkaia, del Gobierno vasco, dirigentes de los diferentes partidos políticos y candidatos para las próximas elecciones autonómicas.

ABURTO, "EN TODOS LOS RINCONES"

El alcalde ha afirmado que no faltará "a ninguna cita" de la Aste Nagusia y va a estar "en todos rincones". Además, espera que "todo salga bien, que no pase nada", y que en fiestas todos se dediquen a "disfrutar y a convivir".

Aburto ha recordado la campaña 'No siempre es no', en contra de las agresiones sexistas, y ha afirmado que las mujeres de Bilbao "tienen que sentir el 'sí' de la ciudadanía, el 'sí' hacia ellas y tienen que sentirse acompañadas por una sociedad que rechaza cualquier tipo de agresión y que dice que sobran todos los agresores".