En un comunicado difundido en las redes sociales, han apuntado que "resulta imposible adjudicarnos cualquier tipo de trato xenófobo", ya que "el personal de nuestra empresa se integra de personas de diferentes razas y nacionalidades". "Resulta más ridículo aún cuando el personal de control de acceso a la caseta es de raza negra", han añadido.

Asimismo, han justificado que, por motivos de aforo completo, y "en cumplimiento efectivo y escrupulosos de la normativa vigente, "se ha impedido a mucha gente el acceso" a la caseta.

Por otra parte, el grupo Maná ha advertido de que "los denunciantes deberán responder antes sede judicial por su denuncia falsa y por todos los daños y perjuicios que se contemplen".

De igual manera, han aludido a los "que están difundiendo calumnias e injurias en redes sociales", e, inclusive, al alcalde de la ciudad, Francisco de la Torre, al que han pedido que "rectifique sus dichos en su cuenta oficial de Twitter y en cualquier otro medio donde los hubiera expresado".

Así, en el comunicado, han criticado que se haya hecho eco de "una denuncia falsa y que no constituye ninguna certeza ni sentencia judicial" y que, desde el Consistorio, no se hayan puesto en contacto con la empresa para informarse de lo ocurrido.

Al derecho de sancionar judicialmente, de la misma forma, al regidor y al Consistorio, han sumado las irresponsabilidad "de diferentes actores del sector político", de los que han dicho que se han sumado a la condena sin contemplar versión oficial por parte de la empresa.

Por último, en el comunicado han pedido disculpas "a los clientes y amigos que se hayan podido sentir afectados por los dichos, versiones, insultos, agresiones y condenas irresponsables a partir de este lamentable hecho".