Valladolid tiene más concejalas, pero aún falta por recorrer un largo trecho para alcanzar la paridad. Tras las últimas elecciones municipales, en la provincia hay 372 mujeres en cargos públicos, 92 más que en la pasada legislatura. Aún así, ellos (1.001) son casi el triple que ellas.

Si se observan las cifras como porcentajes, la presencia femenina en los ayuntamientos ha pasado del 20 al 27% una vez aplicada la Ley de Igualdad, según los datos recogidos por el Foro Feminista. Eso sí, estamos todavía lejos del País Vasco (36,6%) o Madrid (32%).

La efectividad de la ley ha ido muy ligada al tamaño de los pueblos. Donde obligaba (los diez municipios de más de 5.000 hab) la presencia de mujeres ha alcanzado el 42% (la ley fijaba un mínimo del 40%). Sin embargo, en el resto se ha quedado en un 25%.

«Los partidos se tienen que tomar más en serio la ley», apunta la presidenta del Foro Feminista, Nina Infante, quien cree necesario que la ley se extienda a todos los municipios, no sólo en los grandes.

67 pueblos sin concejalas

Otro resultado que arroja este estudio es que en 67 municipios vallisoletanos (uno de cada tres) no hay ni una sola concejala. Todos ellos suman una población de 9.831 habitantes sin mujeres con cargo.

La proporción femenina representada en los ayuntamientos es aún menor que la que estaba presente en las listas. Antes de las votaciones, había una mujer por cada dos hombres en las listas y después ha bajado a casi una por cada tres.

«Esto se puede evitar con el sistema de cremallera pero en muchas listas han relegado a las mujeres a los últimos puestos, de manera que no han salido y no se ha respetado la proporción», explica Nina Infante.

ENTREVISTA A...

ASUNCIÓN BARRIOS, CONCEJALA Y DIPUTADA DEL PSOE

¿Quita mucho tiempo un cargo público?

Mucho más de lo que yo me imaginaba. En la oposición requiere mucho trabajo pero cuando ocupas un área de Gobierno, necesitas una mayor dedicación.

¿Cómo se compatibiliza con la vida personal?

Es complicado de llevar. Ahora mismo no tengo responsabilidades familiares, lo que me permite dedicarme más a la política. Reconozco que si tuviera familia sería muy difícil.

¿Y compensa este esfuerzo?

Realmente sí que compensa, sobre todo cuando los ciudadanos te dan la oportunidad de gobernar. Es donde verdaderamente puedes cambiar las cosas.

¿Se ha sentido alguna vez discriminada en política por ser mujer?

La mayor discriminación es tener que demostrar que estás ahí por ti misma y no por ninguna cuota.

¿Cree que realmente se alcanzará la igualdad algún día?

Yo creo que sí. Se están haciendo verdaderos esfuerzos. Un avance importante ha sido la Ley de Igualdad, aprobada esta legislatura, que favorece la entrada de mujeres en la política.