La fiscal del 'caso del homicida del metro', que se juzga desde hace dos días en la Audiencia Provincial de Madrid, ha pedido que interne durante 14 años y 11 meses a Jorge Ramos Vázquez, acusado de arrojar a Miriam Alonso a las vías del metro en 2005, en un centro psiquiátrico penitenciario. Aunque en un principio exigía siete años de ingreso en la cárcel, ahora ha retirado la primera petición al aplicarle la eximente completa por enajenación mental a consecuencia de su enfermedad.

En su informe de conclusiones, la representante del Ministerio Público admite que el procesado, de 26 años, padece esquizofrenia paranoide con ideas delirantes y alucinaciones que anulan su capacidad cognitiva y su capacidad de controlar sus impulsos.

"Los hechos se enmarcan dentro de la trama delirante", recalca la fiscal, que le acusa de un delito de intento de asesinato con la agravante de alevosía. En cuanto a la responsabilidad civil, solicita a la sala que el acusado indemnice a Miriam con 10.770 euros por el tiempo tardó en curar y 446.289,77 euros por las secuelas.

El acusado pidió perdón

Durante su intervención en la vista, Jorge Ramos dijo que estaba "muy arrepentido" y pidió perdón a su víctima. Minutos después Miriam Alonso le respondía contundente: "Mi perdón no lo va a obtener por muchas veces que lo diga".

Tras concluir el juicio, la joven valoró negativamente la petición de la fiscal de que se interne a Ramos durante 14 años y 11 meses en un centro psiquiátrico penitenciario y aseguró que el único consuelo ha sido la solicitud formulada por su abogada, Olga López, que reclamó 20 años en un psiquiátrico penitenciario y una indemnización de unos 860.000 euros, incluyendo a los padres como responsables civiles directos de los hechos.

"Tres años es muy poco"

A preguntas de si podrá olvidar lo sucedido, Miriam dijo que eso es algo "muy difícil" y apuntó que lo más duro para ella durante el juicio ha sido tener que recordar y escuchar los testimonios.

Por último, apuntó a los periodistas que el momento más desagradable vivido durante estos días ha sido escuchar la petición de 3 años de internamiento de la defensa del acusado. "Para mí eso es muy poco", subrayó.