El anterior permiso de la fábrica fue anulado el año pasado como consecuencia de un error de tramitación de la autorización concedida en 2008. A raíz de esta decisión, la empresa presentó una nueva solicitud que ha recibido el visto bueno de la Administración, tras pasar por las fases de información pública y audiencia.

El director de la fábrica, Jaime Santoalla, ha afirmado que "la concesión de la Autorización Ambiental Integrada es una buena noticia que permite continuar desarrollando una actividad de gran importancia económica y arraigo social en El Bierzo, como en los últimos 92 años".

El permiso administrativo obtenido ahora es similar en términos técnicos o medioambientales a la anterior AAI de la fábrica de Toral, si bien está actualizado con la aplicación de las Mejores Técnicas Disponibles para el sector.

El documento cuenta con una serie detallada de medidas de control de las emisiones a la atmósfera de gases y partículas y recoge también diversas prescripciones para la protección del suelo y las aguas superficiales y subterráneas o la reducción y control del ruido, entre otras.