Recientemente, una joven que estaba haciendo uso del servicio en el citado bar se percató de que había un objeto extraño en el interior del expendedor de papel.

La mujer introdujo la mano y extrajo un teléfono móvil que se encontraba en modo vídeo y grabando en ese momento. Inmediatamente detuvo la grabación y descubrió que el dispositivo contenía numerosos vídeos en los que se filmaba a mujeres mientras se encontraban en los baños, según ha informado la Policía Foral.

La joven salió del aseo y acudió a pedir explicaciones al responsable del local, momento en el que un varón, vecino de la localidad, le arrebató el teléfono diciendo que era de su propiedad.

Al día siguiente, la joven se dirigió a la comisaría de Policía Foral en Tudela, donde interpuso denuncia por los hechos. Los agentes identificaron al supuesto autor, que resultó ser I.A.C., de 44 años, a quien se le imputa un presunto delito contra la intimidad de las personas.

Los hechos fueron puestos en conocimiento del Juzgado de 1ª Instancia e Instrucción número 2 de Tudela.