Así lo han anunciado este martes el delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Juan Carlos Moragues, y el responsable de Baleària en Valencia, Manuel Pérez, en declaraciones a los medios de comunicación después de visitar el dispositivo de seguridad de los cuerpos y fuerzas del Estado desplegado en la terminal marítima de pasajeros del puerto para la llegada de un ferry de Mostaganem, el buque 'Nissos Chios' de 141 metros de eslora y capacidad para 1.400 pasajeros y 300 vehículos.

La conexión regular entre Valencia y Argelia se implantó el 14 de junio tras dos años de preparación y enlaza pasajeros y mercancías en una travesía de alrededor de 11.00 horas; los lunes, miércoles, viernes y domingos desde Mostaganem, y los lunes, martes, jueves y sábado con salida en el puerto valenciano.

Desde que hace casi dos meses partiera el primer barco del servicio especial de verano han utilizado los ferrys alrededor de un total de 17.587 personas desde Valencia y hasta 4.240 con embarque en Argelia, puesto que agosto "es una época de salida" de argelinos a su país y, a partir de finales de mes será "momento de regresos".

De hecho, el delegado de la firma ha avanzado que el desembarco "más fuerte" comenzará la semana que viene con los retornos de la gente que partió hacia Argelia en junio y julio, y que hasta el momento el ferry con mayor ocupación ha trasladado 870 pasajeros y 260 vehículos. Hasta la fecha han llegado o salido del puerto 35 buques, aunque el total previsto para finales de septiembre es de 73 navieras.

Por procedencia, el 70 por ciento de los pasajeros que han utilizado las nuevas líneas son extranjeros, fundamentalmente argelinos que viven en España y en menor medida residentes de diferentes países de la Unión Europea. De ellos, la mayoría son residentes europeos que viajan de vacaciones a Argelia y argelinos con permiso de residencia en un país de la UE, ha destacado Moragues.

En cuanto al pasaje de vehículos en estos barcos, ha destacado que van "llenos sobre todo de coches", al fletar alrededor de 250 cuando cuentan con una capacidad total de 300. Para Moragues, este resultado "demuestra que la línea tiene mucha demanda y que embarcar en Valencia supone un ahorro de tiempo de carretera por sus ventajas frente a otras ciudades (portuarias) del sur".

Con todo ello, el representante del Gobierno ha celebrado los datos "muy satisfactorios" para el puerto de Valencia y ha indicado que conectar la ciudad con el norte de Argelia "es favorable tanto para contactos empresariales como en tráfico de mercancías". "En apenas mes y medio es todo un éxito para una línea nueva", ha asegurado, si bien cree que en el servicio "se pueden mejorar algunos aspectos".

LA LÍNEA SEGUIRÁ EN 2017

La intención de Baleària es mantener este trayecto en los próximos meses y ya ha programado servicios a partir de octubre, con dos frecuencias semanales y tres en fechas puntuales, y el objetivo de que durante el verano de 2017 operen "como mínimo" los cuatro barcos actuales en la línea Valencia-Mostaganem, ha avanzado el delegado de la firma.

Se trata, por tanto, de un paso "muy importante" para la compañía con sede en Dénia (Alicante) dentro de su "apuesta de futuro por crear líneas hasta el norte de África", como el trayecto hasta Marruecos desde Almería y Melilla.

En el caso de Valencia, Pérez ha expresado así su "ilusión" y "orgullo" ante un proyecto "fuerte" que conecta el 'cap i casal' con "el segundo país de exportación desde Valencia" y que supone "una capacidad de negocio importantes". "Estamos muy orgullosos de esta línea y trabajaremos para que sea firme", ha manifestado.

DOS HORAS Y MEDIA DE CONTROLES

Sobre los controles de vehículos y pasajeros, el responsable de Baleària ha explicado que "en ningún caso tardan más de tres horas" y que la mayoría transcurren "como mucho" durante dos horas media, con unos 45 minutos de media por cada 50 coches.

Por tanto, ha asegurado que la fluidez "es considerable" a pesar de la elevada afluencia de viajeros en estas fechas, sin "sensación de largas colas" y ha resaltado la "excelente" coordinación de los cuerpos de Policía Nacional y Guardia Civil.

El dispositivo lo conforman medio centenar de agentes de ambos cuerpos. Por parte de Policía Nacional participan la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras en el control de pasaportes y documentación, la Brigada Provincial de Información para el registro de los pasajeros, la Brigada Provincial de Seguridad de cara a mantener la fluidez de la circulación y evitar incidentes, y una unidad canina cinológica.

Mientras, la Guardia Civil realiza labores de resguardo fiscal, también con una unidad de perros, y controla el tráfico vial con la comprobación de las matrículas, según ha explicado el delegado del Gobierno.

CONTROL DE EXPLOSIVOS, DROGAS Y COMIDA

Al respecto, Moragues ha subrayado que la situación es diferente si los embarques son desde Argelia o Valencia, puesto que salir en el puerto valenciano "supone traspasar una frontera exterior de la Unión Europea y conlleva un mayor control de seguridad y pasaportes".

El control en los vehículos es de carácter aleatorio y se centra en la búsqueda de explosivos, tabaco, drogas y semillas de alimentos prohibidos por parte de los canes adiestrados. En el caso de las personas, los agentes realizan una identificación "exhaustiva" a cada pasajero para evitar la entrada de gente que no cuente con el permiso pertinente, algo que se ha producido en "pocos casos", ha remarcado Manuel Pérez.