Raquel Medina es una de los muchos afortunados universitarios de la UJA que ha obtenido una plaza en otra universidad fuera de España para continuar sus estudios de Topografía en Como una ciudad al norte de Italia, en la frontera de Suiza. Un hecho que está experimentando un repunte muy señalado en cada año que pasa. Después de superar una serie de fases Raquel subirá hoy, por primera vez en un avión, con un objetivo muy claro: aprender de todo lo que voy a vivir allí, especialmente con el idioma; "ya que al rodearme de personas procedentes de varios países me ayudará a adquirir conocimientos en sus idiomas. Yo creo que esto es muy importante desde el punto de vista profesional", admite la joven estudiante.

Sin embargo, llegar a este punto no ha sido nada fácil. Raquel, como muchos universitarios de su edad se han enfrentado a listas de admitidos y no admitidos, así como a unos padres que no acaban de ver a sus hijos volar hacia tierras extranjeras: "Al principio a mis padres no les hizo mucha gracia, ya que no entendían por qué me iba a estudiar mi carrera fuera de España, cuando podía hacerlo en Jaén, que tiene prestigio en las ingenierías como la mía. Al final lo han visto como una oportunidad para que aprenda a convivir con otra gente y sobretodo vea la vida sin depender de ellos", aclara Raquel.

Raquel confiesa que los nervios le atacan cada vez más a medida que se acerca el momento. Junto a otros dos compañeros más de su clase, esta joven jiennense se embarca en una aventura, donde le esperan viajes internos por Italia, conocer a mucha gente de otros países, con diferentes culturas, las típicas fiestas Erasmus. "A parte de aprovechar las clases, está claro que iré a las fiestas; de todas formas he escuchado que allí no hay tanto ‘desfase' como en España", puntualiza.

La mayoría de estos estudiantes, viajan con el fin de enriquecerse cultural y académicamente, ese el objetivo de las Universidades como la de Jaén, que además cuenta con el apoyo de Cajas de ahorros, ayuntamientos y la propia Diputación Provincial. No obstante, el alumno recibe 280 euros a la semana. Es la suma de los 100 que aporta el Ministerio de Educación y Ciencia y 180 de la UJA. "Están viendo la opción de ampliarlo a 300 euros, es decir sumar 20 más por alumno. Eso estaría muy bien, el problema es que con esa cantidad, algunos se sentirían orgullosos de poder pagar un alquiler medianamente digno, aunque luego tendrían que costearse el resto de gastos de sus propios bolsillos. Sé que cada vez somos más los que nos apuntamos a lo del intercambio de universidades, sin embargo, está claro que no todo es oro lo que reluce", apunta la futura topógrafa.

En total la beca tiene un periodo de duración de 10 meses fuera del país, sin embargo, Raquel, ha planificado un planning para tomar dos escapadas en ese tiempo: una en diciembre para pasar las Fiestas navideñas con mi familia y amigos, y otra en febrero para hacer un examen.

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