El hombre, según la investigación, aprovechaba cualquier descuido para acceder tanto a zonas reservadas de vestuarios como a oficinas -en hoteles y comercios- y allí sustraía mediante el uso de la fuerza o al descuido el bolso o pertenencias de empleados o clientes.

La investigación determinó que el detenido aguardaba de forma paciente en las inmediaciones de los establecimientos el momento más oportuno para acceder a ellos y una vez dentro cometía los robos o hurtos.

Así, llegó a sustraer 3.845 euros en efectivo, además de documentación y efectos personales de las víctimas, según han informado desde la Policía Nacional a través de un comunicado.

Los robos y hurtos tuvieron lugar entre los meses de enero y julio en seis establecimientos hoteleros y cuatro comercios de la capital malagueña. En la mayoría de los casos los perjudicados habían denunciado el robo de sus pertenencias, que habían guardado previamente en el interior de unas taquillas, cuyos candados habían sido fracturados.

En los casos restantes los denunciantes manifestaron haber sido víctimas del hurto al descuido de sus efectos en el interior del comercio en el que trabajaban o bien en lugares donde se encontraban de compras.

Las investigaciones llevaron a los agentes a un hombre vecino de Antequera, que resultó detenido el pasado día 28 de julio como presunto responsable de seis delitos de robos con fuerza y cuatro delitos de hurto.

El atestado policial instruido ha sido remitido a la autoridad judicial competente y el detenido ya ha sido puesto a disposición judicial.