Al menos 30 niños han muerto en el noroeste de Myanmar (antigua Birmania) desde el pasado mes de junio cuando una enfermedad desconocida que causa dificultades para respirar comenzó a hacer estragos en la zona, según informa AP.
"Tenemos este problema desde hace dos meses y todavía no hemos recibido ningún tipo de ayuda del gobierno", explica Kay Sai, un administrador local.
Las muertes se han registrados en las ciudades de Nanyun y Lahe, en la región de Naga. Esta zona es una de las más pobres del país y se encuentra a unos 1.300 kilómetros de Yangon, cerca del estado de Nagaland de la India, según explicó Sai. Además, la mayoría de las víctimas han sido menores de 5 años, según cuenta este administrador local.
Según Kay Sai las autoridades no han sido capaces de identificar la enfermedad y que parece ser contagiosa. Por esto, se han enviado muestras de sangre a un hospital de la división vecina de Sagaing y están esperando los resultados.
Ni el Ministerio de Sanidad ni el Departamento de Prevención de Enfermedades de Transmisión han sido capaces de dar una respuesta sobre el brote.
Sai explica que las autoridades locales han prohibido temporalmente a la población viajar a zonas cercanas para evitar el contagio.
El área de Naga es la parte menos desarrollada de Myanmar. Además, está totalmente abandonada con la ausencia, incluso, de los más básicos cuidados de la salud, educación e infraestructura.
Ley Yone, legislador del municipio Lahe, cuenta que la región sufre una falta de transporte adecuado, un número insuficiente de trabajadores sanitarios. Debido a esta situación, incluso enfermedades curables pueden ser mortales, explica.
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