Cinco personas fueron detenidas en Madrid como presuntos autores del secuestro de un joven dominicano en represalia por el impago de una deuda. La víctima estuvo retenida varios días y fue liberado por la policía.

Un ciudadano más fue arrestado igualmente en relación con los hechos, aunque en su caso se le imputa un delito de encubrimiento, informó hoy la Jefatura Superior de Policía de Madrid.

La investigación policial comenzó el pasado día 15, cuando un ciudadano natural de República Dominicana acudió a la comisaría del distrito madrileño de Moratalaz y relató que un hijo suyo, residente en su país de origen, le había llamado informándole de que unos conocidos se habían puesto en contacto telefónico con él para para hacerle saber que tenían secuestrado a su hermano, de 19 años, en Madrid. Según la versión del denunciante, los secuestradores pedían 350.000 pesos de rescate.

La información fue puesta en conocimiento de la Brigada de Policía Judicial de Madrid, que se hizo cargo del caso. Así, en contacto con el entorno del secuestrado, la policía tomó declaración a un familiar de la víctima, quien reveló que el joven de 19 años había recibido 350.000 pesos para que comprara droga en Santo Domingo, pero se había quedado con el dinero y no había traído el encargo ni devuelto los pesos.

Vigilancia de locutorios

Sin embargo, la víctima atribuyó el secuestro a una deuda que tenía contraida por la venta de unos terrenos en República Dominicana.

Gestiones posteriores, entre ellas el rastreo de zonas y la vigilancia de locutorios telefónicos desde donde, según diversos indicios, se habían hecho las llamadas, permitieron que el pasado día 18 localizar a los presuntos secuestradores y a la víctima, que iba con ellos.

Tras ser liberado, el joven contó que el pasado día 14 fue abordado por unos conocidos cuando se dirigía a tomar el metro y uno de ellos le obligó a subir a un vehículo intimidándole con una navaja. Posteriormente, fue llevado a una vivienda de la calle Canillas y, después, trasladado a otra, esta vez en la calle Maracaibo, donde quedó bajo la custodia de dos mujeres.