En una nota remitida por el consistorio palmerino, el alcalde, Manuel García Félix (PP), ha destacado que se trata de "un gran acuerdo gracias tanto a la magnífica gestión técnica realizada, como al éxito político conseguido tras el acercamiento y entendimiento entre las dos corporaciones", el ayuntamiento y la MAS, que "han salvado las distancias que le separaban" y es que "las instituciones están por encima de las personas".

El alcalde ha subrayado que gracias a este acuerdo se va a ver beneficiada La Palma ya que "va a saldar su deuda con MAS y, sobre todo, va a recuperar los pozos y el agua de su término municipal", por lo que es un éxito porque "vamos a pagar la deuda de forma cómoda, pero además, hemos recuperado lo que históricamente es de La Palma".

El portavoz socialista, Álvaro Morcillo, si bien ha expresado que el convenio le parece "razonable", la abstención de su grupo se debe a las "decisiones políticas tomadas con anterioridad". Además ha resaltado que la deuda de 2,8 millones que tendrá que asumir el consistorio repercutirá en los presupuestos, "el convenio como tal no es malo, es la única salida para poner fin a diez años de litigio".

Por su parte, la portavoz de Ciudadanos, Inmaculada Bellerín, ha señalado que "la falta de previsión" desemboca ahora en tener que afrontar una deuda antigua pero a pesar de ello este acuerdo "es muy positivo" en cuanto que se recuperan los antiguos pozos palmerinos, un agua que podrá amortizar esa deuda.

El concejal de Economía y Hacienda, José Carlos Álvarez, ha recordado que no se llegó con anterioridad a un acuerdo porque los derechos de La Palma en cuanto a su agua no se reconocían. Ahora este convenio viene a reconocer que el ayuntamiento "tiene derecho a usar esa agua y aportarla al sistema de gestión de aguas".

Este acuerdo va a permitir aportar el "consumo máximo de agua" que tiene el pueblo de La Palma, que ronda entre los 800 y los 900 metros cúbicos, según ha asegurado Álvarez que ha añadido que ahora se abre "una nueva etapa de relación con MAS".