Según ha informado el consistorio lepero en una nota, con un peso de 415 kilos y unas dimensiones de un metro de ancho por un metro y medio de largo, dichas pasarelas han sido "realizadas de hormigón armado", material que permitirá que sean más limpias, duraderas y resistentes, suponiendo además una mejora de accesibilidad a la zona de playa para personas con discapacidad.

Estas baldosas contienen una copia de la inscripción de las letras de "Lepe", haciendo una mención especial a la tipografía que contenía el suelo de barro de la Almadraba de Nueva Umbría en sus orígenes.

El alcalde de Lepe ha aclarado que esta ha sido una primera actuación y van "a seguir trabajando a lo largo de esta legislatura para invertir en estas mejoras", que sirven tanto para embellecer la zona, como para "aportar un mayor servicio de accesibilidad a la playa de La Antilla".

Además, el primer edil ha destacado que "con este nuevo equipamiento de playa se pone en valor la impronta de aquellos artesanos leperos, para que su trabajo perdure en el tiempo".