Un tunecino residente en Niza que además comparte nombre y  apellido con el autor de la matanza del 14 de julio en la ciudad de la costa azul francesa ha denunciado ser objeto de amenazas. Tal es el miedo del otro Mohamed Bouhlel que duda si volver a su residencia de Francia (ahora mismo está de vacaciones en Túnez).

Y es que el doble del terrorista, Mohamed Bouhlel, también es tunecino y vecino de Niza y aunque él no ha causado las 84 muertes de su homónimo, que fue abatido por la policía, es él el que está sufriendo las amenazas y el odio a través de Facebook.

Según cuenta en un relato a la web de la revista L'Obs, Bouhlel vive una verdadera pesadilla, ya que la gente lo confunde con el terrorista fallecido.

"Como tengo mucho miedo de la acogida que me reservarán los que me abruman con amenazas de muerte y de insultos, he preferido retrasar la vuelta a mi ciudad. Se me esperaba en el trabajo el lunes próximo, pero en estas condiciones no creo poder llegar a tiempo", cuenta el hombre, que dice haberse enterado de la masacre el viernes por la mañana.

Bouhlel se encontraba en Túnez de vacaciones y cuando puso en marcha su móvil se enteró del atentado, en el que también más de 200 personas resultaron heridas, unas cincuentena de las cuales siguen en estado crítico.

Inmediatamente empezó a ver mensajes acusatorios por Facebook y, aunque publicó en su muro un mensaje desmintiendo cualquier relación con los hechos de Niza, el acoso siguió, por lo que finalmente decidió acudir a una comisaría a denunciarlo, sobre todo por la gravedad de las amenazas de muerte.

Se queja de que alguien ha utilizado, sin hacer las comprobaciones debidas, la foto que puso en su perfil de Facebook -su cuenta quedó suspendida después- para propagar por Twitter mensajes como: "La cara del monstruo que ensangrentó Niza".

"Espero que se encuentre rápido al autor de esta confusión y que pague por lo que me ha hecho", dice Mohamed Bouhlel, que añade que su familia en Niza lo está pasando mal y que no deja de recibir llamadas de conocidos que están inquietos por su suerte. La situación es particularmente penosa para él cuando piensa en lo que ha pasado en la ciudad que tanto quiere, y más en concreto en el paseo de los Ingleses, donde trabajó durante años en un hotel. "Nunca habría podido imaginar un drama así. Ser acusado de eso es lo peor de todo".

Sobre la coincidencia de nombres, explica que el suyo es muy común en Túnez, los hay a centenares, pero también que hay una gran diferencia entre él y el autor del atentado, cuyo apellido se compone de dos partes: Lahouaiej Bouhlel.

"Quiero poder volver a Francia como el hombre honrado que soy" y dice esperar que su testimonio sirva para desmentir los infundios que han corrido sobre su persona, pero también "para pedir a todos los que utilizan las redes sociales que presten mas atención antes de propagar rumores".