En concreto, el comité asesor del Plan Cambal ha desactivado el nivel 1 del Plan (Contaminación Accidental en Área Marítima) por dicho vertido.

El director del Plan junto con los responsables de las administraciones que conforman el Comité han tomado la decisión de pasar a la fase de preemergencia del Plan y en estos momentos el mando de la emergencia pasa del Gobierno en el Ayuntamiento de Ciutadella.

El cierre de las dos primeras playas, Cala en Bosch y Son Xoriguer, fue decretado por la DGEI a primera hora del domingo por la mañana y en las últimas horas del mismo domingo la contaminación ya había llegado a alrededor de Sa Caleta, por lo que también se procedió a su cierre.

Una vez se comprobó el alcance de la fuga se procedió a decretar el nivel 1 del Plan CAMBAL y se reunió el Comité Asesor formado por responsables del Ayuntamiento de Ciutadella, Consell de Menorca, Demarcación de Costas, así como de la empresa responsable de la conducción eléctrica, Red eléctrica Española.

La primera medida que se tomó fue impedir el acceso a las personas en la zona afectada, tanto en el entorno de la fuga, a unos 700 metros de la costa, como la parte del litoral afectado.

Así, se decidió iniciar de manera inmediata el despliegue de barreras de contención para delimitar las manchas, y el lanzamiento de mantas absorbentes ya primera hora del lunes un dispositivo de 60 personas conformado por policía local, brigadas de obras, socorristas, técnicos de medio ambiente y voluntarios de protección Civil del Ayuntamiento de Ciutadella, también personal del Consell de Menorca, técnicos de la DGEI, así como el equipo técnico y los operarios de REE, comenzaron a trabajar en la absorción y la contención del vertido tanto desde tierra como desde embarcaciones en el mar.

En paralelo, se procedió a la evaluación de la dinámica de la fuga, para prever su deriva con medios aéreos de salvamento marítimo para ofrecer una visión aérea, y con la aportación del IMEDEA para estudiar la evolución de las manchas teniendo en cuenta las condiciones de oleaje, corriente y viento de la zona durante las últimas horas y las próximas. Al mismo tiempo, técnicos de Medio Ambiente de la empresa seguían realizando análisis periódicos de la calidad de las aguas.

Por último, el Comité de dirección del derrame procedió el martes a la apertura al público de la playa de Son Xoriguer. Mientras, el operativo continuaba trabajando en las playas de Cala de En Bou y Sa Caleta, hasta que el miércoles al mediodía se permitió la apertura al baño de éstas.