Según destaca la compañía en un comunicado, Riotinto es ya una mina en operación y como tal realiza una gestión ambiental de acuerdo con la legislación y la normativa de forma consecuente con sus características y circunstancias históricas y presentes.

Por ello desde el proyecto minero han señalado que es "importante" destacar que todo el trabajo ambiental ejecutado se hace en una situación pre-operacional del proyecto y han destacado que a lo largo de 2015 se ha terminado la reconstrucción y modernización de las instalaciones al mismo tiempo que se han ido realizando las pruebas de producción. De esta manera, se han puesto en servicio todos los equipos del proceso llevándolos progresivamente hasta el nivel de producción diseñado.

Según han indicado desde la compañía se ha realizado un importante trabajo en este año 2015, con "hitos muy importantes" como la implantación efectiva del Plan de Vigilancia Ambiental y las muchas medidas y trabajos derivados de este.

Entre las medidas que incluye este Plan de Vigilancia Ambiental destacan algunas como la creación y control de puntos de medición de la calidad del aire y de la emisión de ruido y vibraciones, la monitorización de la calidad de las aguas asociadas al proyecto, la gestión de residuos no mineros e investigación de suelos potencialmente contaminados por la actividad histórica, o los programas de protección de la flora y fauna y el cuidado de elementos patrimoniales.

A lo largo de 2016, Proyecto Riotinto "va a seguir trabajando" para mejorar cada día su desempeño ambiental y dar cumplimiento a los compromisos adquiridos en la tramitación de su puesta en marcha así como a los "principios de responsabilidad que rigen su política de empresa".