El director de Educación y Competencias de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y coordinador del informe PISA lamenta que en "la educación sigue dominada por la repetición de conocimientos" y que, en el caso concreto de España, "los alumnos no aplican lo que saben a su vida real".

Así, ha destacado que "los conocimientos tradicionales siempre van a representar un papel importante en la educación de las personas, pero es muy importante que los alumnos puedan y sepan aplicar lo que han aprendido", al tiempo que ha asegurado que uno de los objetivos del informa PISA es "ver las cosas desde este punto de vista: queremos que los alumnos no sean loros de repetición, sino que interpreten el conocimiento y lo apliquen".

Durante su intervención en la jornada inaugural del 'Curso de Formación del Profesorado Perspectivas actuales nacionales e internacionales en evaluación educativa', que se celebra esta semana en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) de Santander, también ha comentado que mientras que en Europa dos tercios de los profesores cree en los valores de la sociedad en la que trabajan, en España la cifra es de "uno de cada diez".

Según informa la UIMP en un comunicado, Schleicher ha manifestado que "la mayor parte" de los educadores "siente que la sociedad no aprecia el trabajo que hace todos los días.

En este sentido, ha explicado que "los profesores no tienen una buena percepción de su propio status' y que una "buena forma de subirlas la moral" sería "cambiar la manera de trabajar en las aulas", promoviendo, por ejemplo, la colaboración entre profesores. "Cuanta más cooperación, mejor efectividad y satisfacción laboral", considera.

Además de apostar por conseguir que "no se vean como trabajadores regulares este experto ha concretado que "tres cuartas partes de los profesores ven que trabajan en un entorno hostil hacia la innovación" y las nuevas tecnologías.

Por eso, ha explicado que "los profesores no tienen una buena percepción de su propio status" y que una buena forma de 'subirles la moral' sería "cambiar la manera de trabajar en las aulas", promoviendo la colaboración entre profesores: "Cuánta más cooperación, mejor efectividad y satisfacción laboral", ha comentado.

Además, también ha apostado por conseguir que "no se vean como trabajadores regulares, sino como diseñadores del proceso de formación", al tiempo que ha explicado que existe "cierta desconexión entre lo que los docentes creen que hacen y la realidad, principalmente porque enseñan a la antigua usanza".