El Ejecutivo foral responde así a la moción aprobada el pasado martes en el Parlamento de Navarra instando al Gobierno a que concediera los permisos para llevar a cabo los trabajos.

En este sentido, el Gobierno de Navarra ha recordado en una nota que los responsables del mantenimiento de las infraestructuras son los propietarios y propietarias, quienes deben pedir autorización, tanto ante la Confederación Hidrográfica del Ebro, al tratarse de una intervención en dominio publico hidráulico, como ante el Gobierno de Navarra en su órgano ambiental. "En el caso de la Administración Foral las autorizaciones se concedieron y notificaron el pasado año a sus responsables", ha añadido el Ejecutivo.

En concreto, la limpieza de lodos y gravas de la toma de la presa de 'Las Norias', de la que se nutre la Comunidad de Regantes Traslapuente, fue realizada por la empresa Acciona, propietaria de la misma, la semana del 23 de mayo, "sin ningún tipo de problema y cumpliendo con los condicionantes del informe medioambiental".

Acciona presentó la solicitud de limpieza de acarreos en la toma de regantes el 11 de mayo de 2015. La semana siguiente, el 22 de mayo del pasado año, la Dirección General de Medio Ambiente informó favorablemente este expediente, con la única restricción de usar una retroexcavadora de pequeñas dimensiones y con un periodo de validez de 12 meses.

Por su parte, el pasado otoño se ejecutaron parcialmente, por decisión de la propia Comunidad de Regantes de 'Murillo de las Limas' las obras de limpieza y dragado de la toma en la margen del Ebro. En concreto, se formó un canal entre la margen izquierda del río Ebro y la barra de gravas, sin incidencias ambientales reseñables.

No obstante, el dragado, que también había sido autorizado, no se ha ejecutado en su totalidad, porque dicha comunidad no lo ha considerado necesario para garantizar el riego estival. En concreto, esta comunidad solicitó a finales de 2013 un informe ambiental para un proyecto de limpieza del canal de toma y dragado parcial del río Ebro. El 10 de marzo de 2014 se informó favorablemente, con la limitación de trabajar en los meses de septiembre a febrero.

En noviembre de 2014, la Confederación Hidrográfica del Ebro también emitió resolución favorable a las obras, recogiendo el contenido del informe medioambiental del Gobierno de Navarra, con un periodo de validez de un año.

Posteriormente, el 11 de junio de 2015, la Comunidad de Regantes solicitó trabajar en verano, periodo restringido en el informe anterior. Ante está petición, el 19 de junio, se informó favorablemente siempre y cuando se aportara un documento de vigilancia ambiental que asegurara la no presencia de visón europeo en la zona. Sin embargo, la Comunidad de regantes esperó finalmente a otoño para la realización efectiva de las obras.