El próximo lunes se inicia  en Euskadi una nueva campaña de vacunación de la gripe. Desde ese día, y hasta el 31 de octubre, los mayores de 65 años y los menores de esa edad que presenten enfermedades crónicas como diabetes, bronquitis o cardiopatías, están llamados a pasar por su centro de salud para que les sea administrado el fármaco.

Asimismo, todo el personal sanitario, cuidadores de residencias y trabajadores de los servicios sociales deben recibir también la vacuna, para evitar un posible contagio a la población de riesgo.

Un año más, el consejero de Sanidad, Gabriel Inclán, recordó la importancia de repetir cada año la vacunación, sobre todo entre este sector de la población. «Aunque en ocasiones no la frene por completo, la vacuna ayuda a que si llega la gripe, ésta lo haga con menos virulencia», señaló durante la presentación de la campaña.

El Departamento de Sanidad ha adquirido este año 400.000 dosis, 50.000 menos que el año pasado. Esta reducción se debe a que durante la campaña del año pasado no se llegaron a administrar todas las previstas, al vacunarse el 69,5% de la población. Una cifra que para Inclán sigue siendo «muy elevada».

«Todos los años estamos en torno al 70%, que, si lo comparamos con el resto del mundo, vemos que estamos en el tope», indicó.

Para solicitar la vacuna, los mayores de 65 no tienen más que presentarse en el centro de salud con su tarjeta sanitaria o el DNI, aunque desde el Departamento recomiendan pedir cita previa por teléfono, «para evitar las colas de los primeros días». Por eso, Inclán recomendó, además, hacer uso de todo el horario laboral de los centros, entre las 8.30 y las 14.30 horas. El resto, debe acudir a su médico de cabecera para que éste le facilite el volante correspondiente.

Situación epidémica

Aunque no fue un virus muy agresivo, la gripe que nos atacó el pasado invierno afectó a más gente que la del año anterior, llegando a superar el límite en el que se establece una situación de epidemia (400 casos por cada 100.000 habitantes), en la segunda semana de enero, al alcanzar los 421 casos.

¿Gripe o catarro?

Como novedad en esta campaña, junto con los habituales folletos de llamada a la vacunación, el Departamento de Sanidad repartirá otros dos en los que se indican las diferencias entre los síntomas de la gripe y el catarro, para ayudar a identificarlos.

La gripe, por ejemplo, dura entre 5 y 8 días y produce fiebre alta durante varios días, mientras que el catarro dura menos y, en caso de aparecer fiebre, es baja.

En cualquier caso, para ambas se recomienda utilizar pañuelos de un solo uso, lavarse a menudo las manos y cubrirse la cara al toser y estornudar para evitar los contagios, no fumar, y no tomar antibióticos hasta que los prescriba un médico.