En la sentencia hecha pública hoy, el juez considera a la procesada autora de un delito de lesiones, motivo por el que la condena a los dos años de cárcel.

Inicialmente el fiscal solicitó una pena de 4 años de prisión, porque consideraba que no concurría ninguna circunstancia modificativa de la responsabilidad criminal, y pidió una indemnización para la víctima de 16.684 euros por las lesiones sufridas y 3.005 euros por la secuela.

Durante el juicio oral, celebrado el 23 de julio, el Ministerio Fiscal modificó sus conclusiones y calificó los hechos de un delito de lesiones pero con el atenuante de reparación del daño, por lo que rebajó su petición de condena a dos años de prisión.

La acusada confesó la autoría de los hechos y aceptó esta condena, lo que puso fin al juicio.

Según los hechos probados, la acusada, Emma D.C., de nacionalidad inglesa, se encontraba la madrugada del 9 de febrero de 1998 en un pub de la calle Filipinas de Benidorm con otra persona, que no pudo ser identificada, con la que mantenía "una acalorada discusión".

El camarero, Óscar M.G., les llamó la atención por este motivo e, "inmediatamente, sin mediar palabra, el hombre le dio un empujón y la acusada le "propinó un fuerte puñetazo en la boca que le originó una abundante hemorragia" y la pérdida de dos incisivos superiores, por lo que necesitó asistencia quirúrgica.