La asociación cultural Con los Bécquer en Sevilla, constituida en torno al legado del poeta Gustavo Adolfo Bécquer, ha advertido este viernes de que la Consejería de Cultura ha incurrido en una "discriminación" al anunciar una declaración de bien de interés cultural (BIC) para la taberna y tablao flamenco La Carbonería, nueve años después de pedirlo el Ayuntamiento, pero no reconozca sus "competencias" en el caso de la Venta de los Gatos, que inspiró una de las leyendas del célebre poeta hispalense.

Pilar Alcalá, en nombre de la citada asociación cultural, ha manifestado a Europa Press su "indignación" ante la "discriminación" que a su juicio ha deparado la Consejería de Cultura a la Venta de los Gatos, un ventorrillo enclavado entre los bloques de viviendas del barrio de Las Golondrinas, que constituye "un vestigio becqueriano".

Mientras el antiguo ventorrillo de la avenida Sánchez Pizjuán lleva unos dos años en venta, incluso con algunas ofertas para su adquisición, esta asociación esgrime el "valor cultural y sentimental" del edificio y reclama que sea declarado como bien de interés cultural, para su transformación en un museo relacionado con el legado de Bécquer o un centro cívico.

En ese sentido, Pilar Alcalá ha criticado, intensamente, que la consejera de Cultura, Rosa Aguilar, manifestase que "no hay competencia en el ámbito de la Junta pera actuar" en el caso de la Venta de los Gatos, ya que según palabras de la propia consejera se trata de "un inmueble de propiedad particular, que no tiene ningún nivel de protección patrimonial", pero sí haya actuado en el caso de La Carbonería, que afronta un procedimiento judicial de Primera Instancia en el que los dueños del edificio piden el "desahucio" de la popular taberna por extinción de su contrato de alquiler.

Pilar Alcalá ha manifestado que su asociación cultural no tiene "nada" en contra de La Carbonería, pero sí pide "explicaciones no ya por una doble vara de medir, sino por la discriminación" que atisba en el caso de la Venta de los Gatos. ¿Qué tiene La Carbonería que no tenga la Venta de los Gatos?", ha preguntado retóricamente insistiendo en su "indignación".