Puede aprobarse en noviembre en el Senado. Ni el espíritu ni la letra de la reforma del Estatuto de Autonomía será modificado. Ése es el pacto alcanzado ayer entre el presidente del Gobierno, Rodríguez Zapatero, y el presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, en su cuarta entrevista en la Moncloa.

Los continuos retrasos del texto en su tramitación en el Congreso, debido a que el PSOE ha pedido varias veces ampliar los plazos para presentar enmiendas, han causado dudas en el PP sobre las verdaderas intenciones de los socialistas.

En la mente de los políticos está el pacto que mantiene el PSOE con la UPL en el Ayuntamiento de León, en el que se defiende la autonomía para esta provincia. De hecho, una de las posibilidades pasa por citar en el preámbulo del Estatuto que la comunidad está formada por dos regiones, León y Castilla, algo que fue rechazado ayer por Herrera.

El presidente de la Junta sostuvo que sólo habrá cambios técnicos y más reconocimiento hacia los discapacitados, informa EP.

Por otro lado, Herrera pidió al Gobierno que aumente sus inversiones en Castilla y León un 9% con una partida de 300 millones, sobre todo para tecnología.