César Lodos, además, ha informado de que la policía pide que "declare como testigo protegido una persona", pero desconoce si se trata de un hombre o de una mujer.

Con respecto a los teléfonos, destaca que "por ahí", a su juicio, "sí que se podría arrojar luz", ya que interpreta que esta prueba "sería favorable" a su cliente. Este "sigue defendiendo que no estuvo en la zona del crimen esa noche" y por ello para el letrado "podría aportar luz de dónde estuvo" y acerca de que "efectivamente llamaron a ese teléfono". "Si la víctima recibió llamadas de terceras personas y lo que pudo ocurrir", ha explicado.

"Esa línea de investigación sí que puede tener alguna novedad. Yo creo que los testigos que se están aportando y las declaraciones de testigos protegidos es rebuscar en el pasado y no avanzar en la investigación", ha subrayado.

El hombre de nacionalidad senegalesa fue detenido cinco días después del crimen, cuando se encontraba en la pensión de la calle San Roque que compartía por momentos con la joven de Castro de Rei de la que fue pareja sentimental.

Tras prestar declaración dos días después ante el titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Lugo, Sergio Orduña, que se ocupa de la investigación, permanece internado en la cárcel de Bonxe.

Lodos ha anunciado que tras rechazar su recurso la Audiencia Provincial para la excarcelación de su cliente, volverá a pedirla la próxima semana ante el juzgado instructor. También ha avanzado que para su puesta en libertad se le podría dotar de una pulsera de localización para evitar una posible fuga.