El responsable castellanoleonés de Sanidad ha indicado, poco antes de participar en la jornada Regional de delegados de Hermandades de Donantes de Sangre en Toro (Zamora), que "es un momento para reconocer la labor que realizan estas personas", y ha subrayado que "el trabajo de estas delegaciones es impagable, porque promueven las donaciones, especialmente en las zonas rurales", a lo que ha añadido que esta es la manera en la que garantizan la estabilidad de la donación".

En este sentido, Sáez ha recordado que aunque en Castilla y León "no se tengan grandes necesidades puntuales ni se hagan grandes llamamientos a la donación", el trabajo de las hermandades ha ayudado a que "las donaciones sean estables a lo largo de todo el año" y que Castilla y León sea la segunda región del país en número de donaciones a pesar de que su población "muy envejecida y dispersa".

En Castilla y León, el pasado año incluso se registró un ligero aumento del número de donaciones, hasta alcanzar la cifra de 106.000 "lo que garantiza el trabajo diario de los hospitales", ha subrayado el consejero.

A este respecto, Sáez ha explicado que la sangre en los centros sanitarios "no es solo necesaria para las transfusiones, sino que también se utiliza para elaborar otros muchos productos, ayudar a pacientes con necesidades de plaquetas o para los tratamientos de quimioterapia", ha enumerado.

La media de donaciones en Castilla y León ha alcanzado de esta manera la cantidad de 42 donaciones por cada mil habitantes. "Por eso el apoyo a las hermandades de sangre es fundamental, para que puedan seguir realizando su trabajo", ha apuntado.

Para ello, el consejero se ha comprometido a estudiar la ampliación de los horarios de donaciones para los ciudadanos, que es una de las demandas más antiguas de la delegación zamorana.