El Ministerio Fiscal sostiene que, en la mañana del 6 de septiembre de 2011, el acusado, junto con otra persona (en paradero desconocido), una menor de edad penal y otra mujer -contra la que se ha seguido una causa aparte-, se dirigió a la vivienda y tras llamar a puerta del portal, un joven les abrió la puerta, ya que conocía a algunos de ellos.

Así, el acusado subió hasta el piso y se encontró el chico, que en ese momento estaba saliendo y, tras empujarlo hasta su habitación, tanto el acusado como el otro individuo lo retuvieron en ella durante una hora, sujetándole por los brazos. Mientras tanto, se apoderaron televisión y de diversas joyas, así como de un sello, dos teléfonos móviles y de las llaves del domicilio.

La Fiscalía considera que los hechos son constitutivos de un delito de robo con violencia

y solicita que se condene al acusado a 4 años de prisión.