Tras comprobar el estado del puente, se decidió cortar al tráfico por motivos de seguridad el vial del puente afectado, ya que cuenta con otro carril con estructuras separadas. "Desde que tuvimos conocimiento de que estas fisuras y desprendimientos comprometían la seguridad del puente, se cortó al tráfico el vial sentido Sevilla y se colocó regulación semafórica, al tiempo que se iniciaron todos los procedimientos para la licitación y ejecución de las obras", ha explicado el delegado territorial de Fomento y Vivienda en Sevilla, Jesús María Sánchez, a la alcaldesa de Cantilla, Ángeles García, con quien ha estado en permanente contacto para informarle de las decisiones adoptadas hasta el comienzo de las obras.

La actuación, que cuenta con un presupuesto de unos 54.000 euros, tiene un plazo de ejecución aproximado de un mes y servirá para dotar al puente de la seguridad necesaria. La obra consistirá básicamente en derribar el estribo dañado, "de un puente que cuenta con más de 50 años", ha añadido el delegado territorial, y la posterior construcción de un nuevo estribo de hormigón armado, más resistente y duradero, con el que se restablecerá la normalidad desde el punto de vista de la seguridad.

Jesús María Sánchez ha comentado además a la alcaldesa que esta actuación, "como todas las de rehabilitación de estructuras, requiere una definición muy pormenorizada del procedimiento de ejecución, siendo necesarios unos medios materiales y humanos muy cualificados, ya que se trata de actuar sobre una estructura muy antigua". Asimismo, ha garantizado el control de la ejecución de los trabajos, con objeto de no afectar a otros elementos estructurales del puente.