La investigación comenzó el pasado mes de abril cuando los guardias civiles tuvieron conocimiento de la existencia de varias viviendas utilizadas para el cultivo de marihuana.

Tras conocer los agentes el modo modus operandi de la organización, los investigadores determinaron que uno de los detenidos alquilaba viviendas en lugares tranquilos y alejados para ser utilizadas con el único propósito de producir droga, la cual era distribuida posteriormente por otros miembros de la organización.

También tuvieron conocimiento de que la organización producía una gran cantidad de marihuana, por lo que los agentes decidieron realizar la fase de explotación de la operación el pasado día 6 de junio, según ha informado la Guardia Civil a través de un comunicado.

Durante la operación, denominada 'Marquesilla', los agentes han detenido a cuatro personas de nacionalidad española como presuntos autores de los delitos de tráfico de drogas y defraudación de fluido eléctrico, quedando desarticulada la organización criminal y tres laboratorios de producción intensiva de marihuana indoor.

En los tres registros domiciliarios realizados los agentes han incautado 1.400 plantas de marihuana y 37,5 kilogramos de esta droga dispuesta para su distribución.