El cantante de Mucho, Martí Perarnau, ha asegurado en una entrevista a Europa Press que la banda que llega a la capital regional con un show "muy potente" que hasta ahora no han podido reproducir en la ciudad.

Será un concierto "muy especial" en parte "por ser la ciudad natal de dos de los miembros grupo" -Miguel de Lucas y Carlos Pinto-. "Es un sitio muy importante para nosotros porque nos trae viejos recuerdos que harán que el concierto sea muy bonito. La verdad es que ya nos apetece", asegura.

SUSTANCIAL CAMBIO EN SU ÚLTIMO TRABAJO

Perarnau ha hablado del sustancial cambio que se puede observar en su último trabajo con la entrada de sintetizadores y la pérdida gradual de la guitarra, asegurando que, aunque no descarta recuperar las cuerdas en el futuro, tiene la "sensación" de que los teclados se quedarán en el ADN de la banda.

El cantante ha explicado que, momentos antes de componer los nuevos temas, se hizo con un teclado de los años 70 y lo primero que hizo fue elaborar 'Fue'. "Descubrí que se podían hacer canciones sin usar guitarras, y tuve esa clarividencia de que no iba a ponerme límites para hacer canciones con las teclas".

En un primer momento no descubrió sus cartas al resto de la banda, pero una vez tuvo cinco temas, llegó el momento de presentar esta evolución en la composición.

"Siempre piensan que estoy zumbado, eso ya lo tienen claro. Les enseñé estas canciones diferentes y en principio hubo dudas que incluso llegaron hasta la propia grabación, pero los productores pensaron que era una idea perfecta y al final el grupo tuvo que claudicar", dice entre risas.

EL DIRECTO, "MÁS BAILONGO"

Asimismo, ha reconocido que una vez las guitarras han dejado paso a los sintetizadores, los directos son "más bailongos" que en el pasado

"Las canciones suenan más poderosas que las antiguas en directo. Teníamos miedo de que pudiera ser al revés pero nos hemos llevado una grata sorpresa. Todo suena mucho más potente que el concierto básico de guitarra y batería y ahora disfrutamos tocando las nuevas canciones", ha indicado.

Tal y como ha definido este último trabajo, surge de la intención de que el grupo "se lo pase bien" tocando los temas. "Nos gusta mucho la música, la escuchamos, queremos que nos resulte interesante lo que hacemos, y ya nos parecía aburrido intentar repetir la fórmula".

En este punto, ha abundado en que todos los miembros de la banda comparten su idea de "buscar nuevos lenguajes". "En la composición de este último disco tuve una época de apertura musical, descubrí nuevos artistas y entré muy fuerte, por ejemplo, en el mundo de Jorge Drexler o en el rap de Kendrick Lamar", ha apuntado, añadiendo que son dos cosas que "de pronto" se instalaron en su cabeza.

Así, se ha referido a que, en cierto momento, se dio cuenta de "toda la música" que tenía alrededor. "Y cuando eso ocurre te sientes muy pequeño. Digamos que estoy en una fase de no tener ninguna barrera musical. Supongo que esto irá a más".