Según ha informado la Policía, todos los detenidos pertenecían a un mismo clan. Uno de los domicilios era utilizado para consumo de sustancias estupefacientes por parte de los toxicómanos que acudían diariamente para abastecerse.

La Policía tuvo conocimiento a inicios del mes de julio del pasado año, a través de informaciones anónimas, de la existencia de un punto de venta de drogas, especialmente de cocaína -tanto en base como en polvo-, así como de heroína.

El mencionado punto era muy activo y se encontraba ubicado en una vivienda de dos plantas de la barriada de El Cerro. Sin embargo, cesó su actividad debido a las intensas vigilancias a las que era sometido hasta que se volvió a reanudar a principios del presente año y se retomó la vigilancia. Fruto de la nueva vigilancia se localizaron otros dos puntos más de venta.

Durante semanas, los investigadores sometieron las zonas de los domicilios a una minuciosa vigilancia en la que se pudo comprobar las sucesivas entradas y salidas de toxicómanos. Una de las viviendas vigiladas se dedicaba al consumo por parte de los toxicómanos con el fin de evadir la acción policial.

Las vigilancias permitieron identificar a los miembros del clan criminal, ocho en total. Practicado el registro judicial fueron detenidos y tres de ellos ingresados en prisión por orden judicial. Parte de la droga intervenida se encontraba entre unos tubos del registro de evacuación de aguas.

En el operativo policial han participado dos equipos de la U.P.R., un equipo de GOES, otro de Guías Caninos de la Jefatura Superior de Andalucía Oriental, así como más de veinte efectivos de la Comisaría de Linares.