Según fuentes de la Comandancia Provincial de Salamanca, las investigaciones comenzaron hace dos meses y a los presuntos autores, con "numerosos antecedentes", se les atribuye al menos seis estafas en las localidades salmantinas y cacereñas de Guadapero, Serradilla del Arroyo, Lumbrales, Cepeda, Santa María de los Llanos y Coca de Alba.

Estos supuestos revisores de las instalaciones de gas seguían siempre las mismas pautas para cometer las supuestas estafas y cambiaban de vehículo a menudo para dificultar su identificación y seguimiento.

De la investigación se desprende que las supuestas víctimas fueron personas de avanzada edad, a quienes les decían que debían realizar las revisiones y caso de que se opusieran "no dudaban en usar amenazas como que le iban a cortar el suministro del gas".

Cuando conseguían entrar en los domicilios, en algún caso llegaban a cortar la goma de los reguladores y sin realizar trabajo alguno, les extendían facturas con precios elevados, y también les engañaban con la contratación de un servicio de mantenimiento que no es obligatorio.