La tasa se calcula siguiendo el indicador europeo AROPE, que combina distintas variables que van desde los ingresos o la intensidad en el empleo hasta la capacidad de los hogares para afrontar determinados gastos, como mantener caldeada la casa en invierno o pagar a tiempo los recibos.

De este modo, Cantabria se sitúa 8,4 puntos por debajo de la tasa española de riesgo de pobreza o exclusión social (28,6%) y como la quinta comunidad con una tasa más baja.

Según el desglose del INE, de ese 20,4 por ciento de la población de Cantabria en riesgo, el 14,9 por ciento está directamente en riesgo de pobreza, el 3,5 por ciento se encuentra en una situación de carencia material severa y el 15,5 por ciento está afectada por baja intensidad en el empleo. Todos estos parámetros se encuentran por debajo de la media nacional excepto el del empleo (15,4% en España).

Además de los resultados del indicador europeo AROPE, el INE ofrece su propia estadística de población en riesgo de pobreza, una tasa que se calcula atendiendo al nivel de ingresos tomando como referencia la mediana nacional y que no mide pobreza absoluta, sino desigualdad. Se considera que una persona está bajo el umbral cuando percibe menos del 60% de la mediana, es decir, en 2014, 16.823 euros al año para una familia de dos adultos con dos hijos.

Desde esta perspectiva, la población en riesgo de pobreza en Cantabria también disminuyó el año pasado respecto al anterior pues fue el 14,9%, casi seis puntos menos que un año atrás, cuando se situó en el 20,6%.

De este modo, Cantabria se sitúa 7,2 puntos por debajo de la tasa española de riesgo de pobreza o exclusión social (22,1%) y también como la quinta comunidad con una tasa más baja, en un ranking que encabeza Andalucía (35,7%) y finaliza Navarra (9,6%).

Por otra parte, el ingreso medio anual neto por persona se situó en Cantabria en 2014 en 10.494 euros, 75 euros mayor que la media nacional (10.419 euros), y el décimo más alto por comunidades en una lista liderada por el País Vasco (13.836 euros) y que concluye en la Región de Murcia con 7.924 euros.

La renta media de los hogares de Cantabria en 2015 ascendió a 25.282 euros, lo que supone 810 euros menos que la media nacional, situada en 26.092 euros.

DIFICULTADES A FIN DE MES

Según la Encuesta de Condiciones de Vida, prácticamente el 54,3% de los hogares cántabros presentan algún tipo de dificultad para llegar a fin de mes, dato inferior al registrado para el total nacional situado en el 63,1%.

El 12,5% de los hogares cántabros llega "con mucha dificultad" a fin de mes, 2,7 puntos menos que en 2014. Este porcentaje es inferior en más de un punto al del conjunto del país (13,7%).

Los hogares que llegan con dificultad a fin de mes suponen el 17,3% y los que lo hacen con ciertas dificultades representan el 24,5%. Mientras, los hogares con cierta facilidad para llegar a fin de mes alcanzan el 26,7%. Solo el 1,4% de los hogares llega con mucha facilidad a fin de mes.

Además, un 29,2% de los hogares de Cantabria no tiene capacidad para afrontar gastos imprevistos (3,4 puntos menos que hace un año) frente al 40,6% de media; y el 6,2% tiene retrasos en los pagos a la hora de abonar los recibos de la vivienda, en este caso 1,6 puntos más que hace un año aunque también por debajo de la media del 9,4%.

En cuanto a los cántabros que no se pueden permitir ir de vacaciones fuera de casa una semana al año, en 2015 fueron el 29,9%, lo que supone 22,7 puntos menos que en 2014 (52,6%). El 40,6% de los hogares de España no puede permitírselo.

VIVIENDA

En cuanto a los problemas que presentan las viviendas de Cantabria, la mayoría de las personas encuestadas declaran no tener ninguno (76,7%), cifra inferior a la de hace un año.

En consecuencia, han aumentado los porcentajes de viviendas con problemas. El más alto corresponde a las que sufren los ruidos producidos por los vecinos o en la calle (11,9%), seguido de la delincuencia o vandalismo (7,2%). La contaminación y otros problemas ambientales afectan al 6,5% de los hogares y la escasez de luz natural al 2,1%.

Por otra parte, la forma más común de tenencia de vivienda en 2015 en Cantabria es la propiedad, con un 76,5%, seguida del alquiler a precio de mercado con el 12,7%, la cesión gratuita con el 9% y el alquiler a precio inferior al mercado con el 1,8%.