Los hechos se desencadenaron cuando recibieron una llamada procedente de la sala del 091 en la que les alertaba, según los propietarios, de unos individuos que habían ocupado la casa que tenían para su venta.
Personados de inmediato en el lugar, los agentes fueron recibidos por el propietario de la casa ocupada, el cual les puso al corriente de los hechos, informa la Policía en una nota.
Los agentes se pusieron en contacto con los inquilinos, y observaron los cuantiosos daños ocasionados a la vivienda, como en la puerta principal, por el forzamiento, así como en las puertas de los dormitorios, que tenían el marco arrancado. En el garaje, habían roto las ventanas y la puerta del mismo anclándolas desde dentro con unas cadenas. Además, aún careciendo del suministro de luz y agua, se comprobó que tenían un 'enganche' ilegal al fluido eléctrico.
En la inspección de la misma los policías hallaron una bolsa con tres pistolas, dos de aire comprimido y una antigua, cuatro cuchillos de grandes dimensiones y unos grilletes metálicos, de los que se hizo responsable uno de los ocupantes.
Ante tales hechos, se procedió a la detención de los mismos y a la intervención de las armas. Los detenidos fueron puestos posteriormente a disposición de la autoridad judicial.
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