Ante la "grave" situación de emergencia social que padecen especialmente las personas en contextos socioeconómicos más vulnerables, y lo limitados que resultan los recursos municipales, el gobierno local ha elaborado una estrategia de trabajo "en red" con otras organizaciones y agentes sociales, que, según el delegado de Servicios Sociales, "no suman sino que multiplican nuestros esfuerzos poniendo en valor la inteligencia colectiva".

Así, uno de los proyectos que mejores resultados obtiene es el que lleva a cabo la Delegación de Servicios Sociales, la Oficina en Defensa de la Vivienda y Cruz Roja. Según la Vicepresidenta Provincial de Cruz Roja, Cándida Ruiz, "tras los primeros cinco meses de funcionamiento del proyecto los resultados son satisfactorios, aunque la verdadera satisfacción sería que este tipo de iniciativas no tuvieran que existir".

El convenio firmado se planteó con un objetivo de atender a 20 familias o unidades convivenciales residentes en Córdoba en situación de exclusión residencial reciente, a través de un programa de atención social integral que tiene tres partes, según informa el director de Intervención Social de Cruz Roja, Germán Ayala.

En concreto, se trata del "alojamiento temporal que se brinda a las familias, ayudas económicas directas para cubrir necesidades básicas y los Planes Personalizados de Intervención", que consisten en una atención personalizada de las trabajadoras sociales que se ajustan a cada caso.

ENCONTRAR ESTANCIA DEFINITIVA

Hasta la fecha se han atendido a 51 personas de 15 familias, de las cuales diez -un total de 33 personas- están o han estado en uno de los cinco pisos que se gestionan en el plan. El objetivo es encontrarles a las familias una estancia definitiva en pisos de alquiler social, tanto del parque público de viviendas como de entidades bancarias. Esta fase de "salida" del plan ya la han alcanzado dos familias y a lo largo de este mes lo harán otras tres, lo cual permitirá realojar a otras tres familias de las diez que se encuentran actualmente en lista de espera.

Las otras cinco familias atendidas han recibido ayudas directas de diversa índole, como por ejemplo el pago de mudanzas o la estancia en hostales. En total, existe un presupuesto de 20.000 euros para ayudas directas a las familias, de las cuales se llevan ejecutados 6.173 euros, lo que deja un remanente de casi 14.000 euros para lo que resta de año.

Según estas cifras se prevé superar el objetivo inicial, llegando a atender probablemente a unas 25 o 30 familias a lo largo de 2016.