20 minutos lo publicó a principios del pasado julio tras una denuncia del Sindicato Médico. Ahora, la Consejería de Salud, en una respuesta parlamentaria, sostiene que el uso de cámaras de vídeo vigilancia en los servicios de urgencias de los centros hospitalarios ayudan a "controlar y actuar" en situaciones conflictivas entre usuarios y profesionales, si bien desmiente que estos dispositivos graben en el interior de las consultas.

María Jesús Montero, titular del ramo, argumenta que la finalidad de estas cámaras es que el servicio de seguridad "pueda controlar y actuar en situaciones conflictivas entre usuarios y profesionales, así como material de prueba en caso de asistencia a juicio de un profesional agredido o de molestias a los usuarios".

Además, aclaró que desde el pasado 1 de enero de este año se han instalado en las urgencias del Hospital General Virgen del Rocío de Sevilla y en el San Cecilio de Granada. Y que las imágenes se almacenan durante un tiempo, las cuales se eliminan transcurrido un tiempo "si no ha ocurrido ningún incidente".

En las Urgencias del Hospital Virgen del Rocío se han instalado dos cámaras fijas en el hall de distribución de pacientes. Las imágenes captadas son visionadas de forma "inmediata y permanente" en una pantalla por el vigilante de seguridad de la puerta de entrada a la zona de urgencias del hospital y en el puesto de control central almacenándose en una grabación por un período de 10 días.

En cuanto al Hospital San Cecilio, informó que en dicho centro se han instalado tres cámaras para cubrir la sala de espera, atención al usuario, asientos de espera, entrada a los aseos y, en general, toda la sala del servicio de urgencias.