Así, a las 12 horas, las campanas han sido volteadas de nuevo después del proceso de restauración que se inició tras la caída de la campana 'El Jaume', en Navidad de 2014, según ha indicado el presidente de la Asociación de Campaners de la Catedral, Francesc Llop.

"La caída de 'El Jaume' no produjo ningún daño personal pero la campana perdió sus asas, no su sonido, que es el mismo que tenía desde su origen en el año 1429", ha añadido.

Los toques manuales de la Catedral han seguido interpretándose, sin interrupción, desde entonces, pero solo se volteaban aquellas campanas que a lo largo de este tiempo estaban siendo restauradas.

Según el Arzobispado, el proceso de restauración, no sólo de la campana afectada sino también de las otras que ya fueron intervenidas en 1992, ha consistido en cambiar los ejes de acero por otros de hierro dulce, de un diámetro aproximadamente el doble del anterior, y bajo la supervisión de ingenieros de la Universitat de Alacant.

TRABAJOS DE MÁS DE 18.000 EUROS

Los trabajos, cuyo coste supera los 18.000 euros, han sido íntegramente financiados por los Campaners de la Catedral de Valencia, mediante fondos propios y con la ayuda anual que recibe por parte del Ayuntamiento de Valencia.

Por su parte, el Cabildo de la Catedral ha decidido de momento no abrir la sala al público, como era habitual antes del incidente, "aunque los toques manuales a lo largo del año seguirán realizándose como ha sido normal desde 1988", ha señalado.