Después de que el pasado mes de julio la Plataforma Anti Vertedero de Nerva denunciara que la empresa que gestiona estas instalaciones estaba procediendo a su ampliación "sin transparencia" y que se estaban produciendo filtraciones "de las que no se conoce el alcance", han sido muchos los sectores que han vuelto a pedir la constitución de una comisión de control del vertedero de residuos tóxicos de la localidad.

El último en reclamar la formación de este foro de participación ha sido el grupo municipal de IU en el Ayuntamiento de Nerva, que ya ha adelantado que está elaborando una propuesta para su composición y sus funciones.

IU consideró que éste sería el mejor espacio para el debate y la "búsqueda del máximo consenso posible" para gestionar el vertedero.

El alcalde de la localidad, Domingo Domínguez, ha salido al paso de estas declaraciones y ha anunciado que espera aprobar la constitución de la comisión de control y seguimiento en el próximo pleno del Ayuntamiento que se celebrará el 28 de septiembre.

Domínguez recordó que esta iniciativa fue suya y aseveró que su compromiso es "total" con la puesta en marcha de la comisión. Para ello, según el alcalde, será necesario llegar a un acuerdo con el resto de partidos políticos del consistorio (PSOE e IU).

Demanda histórica

El portavoz de la Plataforma Anti Vertedero y de Ecologistas en Acción, Juan Romero, ya denunció el pasado mes de julio que el Equipo de Gobierno de Nerva no se había pronunciado sobre las supuestas ampliaciones de las instalaciones.

Según Romero, la empresa gestora no había esperado a la concesión de la Autorización Ambiental Integrada (AAI) escudándose en que contaba con la licencia del Ayuntamiento. En esta línea, reclamó la participación de los ciudadanos y la convocatoria urgente de la comisión de seguimiento del vertedero.

La organización ecologista denunció que esta empresa "pretende traer polvos de acería de su planta en el País Vasco - a la que llegan procedentes de Bélgica y Alemania principalmente- para su reciclaje en Huelva".

Juan Romero, también aseguró que Befesa pretendía construir una planta para el tratamiento de líquidos que serían depositados en el río Tinto. Sin embargo, la Fiscalía de Huelva decidió en agosto archivar la denuncia sobre las supuestas irregularidades cometidas en el vertedero.

A 600 metros de las viviendas

Los ciudadanos de Nerva viven a tan sólo 600 metros del vertedero por lo que muchos sectores han exigido la realización de un estudio epidemiológico que garantice que su actividad no es perjudicial para los vecinos. Asociaciones y partidos políticos vienen demandando desde hace años su cierre.

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