Las movilizaciones se iniciarán el domingo, 1 de mayo, a las 11.30 horas, desde la Plaza San Miguel de la capital aragonesa y a las 12.00 horas desde la Plaza Zaragoza de Huesca, la Plaza de la Catedral de Teruel y la Plaza Regallo de Andorra, mientras que en Tarazona se celebrará un almuerzo popular, a partir de las 10.00 horas, en la calle de los sindicatos y, posteriormente, se ha convocado una concentración en la Plaza San Francisco del municipio zaragozano.

Así lo han explicado este martes en rueda de prensa los secretarios generales de UGT-Aragón y CC.OO.-Aragón, Daniel Alastuey y Julián Buey, respectivamente. Este último ha señalado que los derechos "ni nos los regalan, ni se heredan, hay que conquistarlos y defenderlos día a día y por eso movilizaciones como las del 1 de mayo tienen que ser masivamente seguidas".

El secretario general de CC.OO.-Aragón ha lamentado que el 1 de mayo se desarrollará en una situación "complicada" y de "inestabilidad" a nivel internacional, con una Europa que ha salido de la recesión, pero "que sigue en una crisis profunda" y que está consolidando un crecimiento "a dos velocidades".

El modelo europeo "se está marchando por el sumidero de la historia" debido a la mala gestión que se realiza de la crisis de Ucrania, de la guerra en Siria y por negar a millones de refugiados su "derecho al asilo y refugio con un acuerdo sangrante" con Turquía. Además, los atentados de París, Bruselas y Ankara "sirven de excusa para limitar las libertades", ha comentado Buey, para rechazar el aumento de la xenofobia en Europa.

En España, ha continuado Buey, la gestión de la crisis ha supuesto un aumento de las desigualdades "que está directamente vinculado a los recortes, la austeridad y las reformas laborales" y ha estimado que la situación del mercado de trabajo tiene una "relación directa con el aumento de la pobreza".

TRABAJADORES POBRES

"La pobreza ya no es solo cuestión de personas paradas, también de personas ocupadas", ha alertado Buey, al explicar que, según un estudio de CC.OO. de 2014, en Aragón hay 35.000 trabajadores que cobran menos de 342 euros al mes de salario bruto medio; otros 38.000 no superan los 717 euros de media y 47.000 más perciben como máximo una media de 945 euros.

"72.400 aragoneses tienen trabajo y están por debajo del umbral de la pobreza", ha aseverado Buey, para agregar que un 25 por ciento de los trabajadores de esta Comunidad no alcanza a cobrar los 950 euros al mes y los salarios han perdido una media del 8 por ciento de poder adquisitivo desde el inicio de la crisis, un porcentaje que se eleva hasta el 24 por ciento de pérdida de poder adquisitivo entre quienes reciben un salario más bajo.

Buey ha comentado que los ciudadanos perciben como el principal problema de la población el desempleo y los "malos salarios" y, por ello, "exigiremos al Gobierno de España, cuando se configure, que emprenda planes contra el desempleo" y también "planteamos al Gobierno de Aragón que urge la puesta en marcha de planes de empleo". Ha instado al Ejecutivo autonómico a "ser más diligente en la gestión del diálogo social".

REIVINDICACIONES

Daniel Alastuey (UGT) ha resumido las reivindicaciones de los sindicatos en este 1º de Mayo, que pasan por derogar la 'Ley mordaza', las reformas laborales y "también nos preocupa lo que ocurre en Europa" y la "escandalosa situación de los refugiados", solicitando que se suprima ese acuerdo "inmoral y que atenta contra los derechos humanos".

"Pedimos la retirada del acuerdo de comercio con Estados Unidos y con Canadá" porque suponen "una amenaza contra los derechos de los trabajadores", ha dicho.

Ambos sindicatos han reclamado de nuevo una reforma fiscal "equilibrada" y que permita ampliar la capacidad de recaudación de las Administraciones, así como reforzar la negociación colectiva, reactivar los salarios y aumentar el salario mínimo de forma progresiva hasta que alcance el 60 por ciento del salario medio, promover una prestación de ingresos mínimos, ha repasado Buey.

El 1º de Mayo es también una jornada para reivindicar las libertades y derechos y, en este sentido, ha incidido en la necesidad de derogar la 'Ley Mordaza' y el artículo 315.3 del Código Penal, por el que 300 sindicalistas continúan con procedimientos penales abiertos que podrían implicar "graves sanciones o ir a parar a la cárcel", para recalcar que el derecho a huelga es "fundamental".

En clave nacional, Alastuey ha exigido a las fuerzas políticas "que hablan de cambio" que "se pongan de acuerdo para que este se produzca", al advertir de que "ser de izquierdas es transformar la realidad" y ha coincidido en pedir al Gobierno de Aragón que impulse cuanto antes políticas de empleo y que promueva el diálogo social.