El concejal de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Oviedo, Luis Zaragoza, ha acusado al Gobierno tripartito del Ayuntamiento de Oviedo de no disponer ayudas para los propietarios y comerciantes afectados por el incendio de la calle Uría del pasado 7 de abril porque "son sospechosos de ser ricos". Además, ha reclamado que el Consistorio articule una línea de liquidez para ellos y exenciones en el IBI, el IAE y tasas por las obras correspondientes.

En una rueda de prensa, Zaragoza se ha mostrado muy crítico con la gestión que el Gobierno municipal está desarrollando al respecto de este asunto. Especialmente molesto se ha mostrado con la afirmación del concejal de Seguridad Ciudadana, Ricardo Fernández, de que el Consistorio "no es una aseguradora". También ha rechazado la intención municipal de analizar "caso por caso" para estudiar posibles ayudas a los comerciantes.

En su opinión, el Gobierno municipal "muestra su verdadera cara: los comerciantes y propietarios de Uría son sospechosos de ser ricos y a los ricos ni agua".

Para el edil, el Ayuntamiento tiene instrumentos para empezar a articular ayudas a los afectados. Así, ha propuesto una línea de crédito sin intereses "para atender a las necesidades urgentes de los afectados". A juicio de Zaragoza, el Ayuntamiento debe poner de manera inmediata dinero a disposición de estas personas si no quiera dejar tirados a los vecinos afectados". Ha recordado que muchos comerciantes "van a depender de esa liquidez para su subsistencia".

También ha exigido un convenio con entidades financieras para la obtención de créditos blandos a los afectados y la creación de un fondo de ayuda para los afectados hasta que cobren las indemnizaciones.

Por otra parte, ha planteado su propuesta en materia tributaria: bonificaciones del 95% en el pago del IBI para los propietarios de inmuebles quemados; bonoficiaciones del 95% en el IAE para comerciantes; y exenciones de las tasas de las obras para adecuar los inmuebes incendiados.

En la misma línea, ha reclamado un plan especial de recuperación del comercio de la zona que incluya medidas como permiso para la ocupación de vía pública con escaparates móviles, apoyo para mercadillos y ferias de stock y autorización de instalación de carteles provisionales para locales que pierdan visibilidad por las obras.

El concejal ha descartado que la articulación de estas medidas pueda suponer un agravio comparativo con particulares afectados por otros incendios en Oviedo, basándose en las dimensiones particularmente grandes del siniestro del 7 de abril, que conllevó "del derribo de dos edificios" e importantes a fecciones al comercio del centro de la ciudad.

Entiende el concejal que el Gobierno municipal no solo ha negado ayudas sino también información. Ha considerado "un insulto" la primera previsión ofrecida por los responsables municipales a los comerciantes del plazo para reabrir sus negocios: "15 días o un año".