Lo malo es ni darse cuenta... ¿de qué?

De que nos utilicen de mala manera, como nos ha pasado tiempo atrás. Con el PP ha habido una época de agobio infame, me daba muy mal rollo ver cómo todo lo que habíamos evolucionado nos lo estaban quitando.

¿Sigue loco por incordiar?

De alguna manera.

Se ha cortado algo el pelo...

Llevarlo largo es un coñazo, y yo soy de esa generación un poco pasota y no me gusta cuidármelo. Soy un desastre en ese sentido.

Un año más sigue en los festivales, ¿es un principio?

Trabajar es lo primero, me llaman, los jóvenes me mantienen en activo y yo encantado.

¿Qué le dice su hijo Rodrigo (27 años)? Creo que él tiene un grupo de mestizaje...

Siempre fue crítico conmigo, tuvimos una época en que no nos llevábamos, y me dolía pensar que podíamos perder la comunicación.

Y ahora…

Por suerte ha mejorado mucho la cosa. Ha colaborado en el disco, los dos vivimos en Carabanchel, nos vemos...

¿Y qué tal con los vecinos?

Es con quienes más cómodo estoy, me conocen. Y la popularidad la llevo mal, ya no me apetece salir a la calle o ir a conciertos porque me paran.

Tiene calle en Leganés, ¿y si le levantaran un monumento en Carabanchel?

Esas cosas me suenan raras. Me siento agradecido, pero no me lo creo para nada.

A los 51 años, ¿tiene dudas?

Siempre las tuve, pero la edad te cura de muchas cosas, le quitas importancia a lo trascendente y valoras más lo cotidiano. Me siento afortunado de hacer lo que me gusta.

Ahora quiere parar un poco...

Me gustaría hacer cosas que no hago por inercia, a veces siento que hago siempre la cara 3 y la 4 del mismo disco.

¿Es tan auténtico como dicen sus etiquetas?

Peleo por lo que quiero.

Su cara más personal

Dice que su lugar es «Madrid, aunque agobie» y aunque su capricho sea «tener una casa fuera y hacer un estudio». Le gusta «coger el coche y pirarme de viaje». Entonces escucha la música que le va, «los clásicos: Peter Gabriel, Clapton, y ahora me pone Ben Harper». Fuma mucho, y reconoce que su mujer, que «es de comer verde», no puede con él. Yo veo un jamón... y que me quiten la lechuga». No ayuda mucho en el hogar, «me educaron a la antigua».

Bio

Nació en 1954, se crió en Carabanchel (Madrid), estudió con los salesianos y perteneció al coro. Es imprescindible para el rock nacional, con Ñu, Leño, y en solitario.